La popularidad creciente de los servicios de mensajería en el móvil a través de la conexión a Internet implica para las operadoras de telefonía una disminución sustancial de los ingresos que obtienen por el servicio de mensajes de texto: quien usa WhatsApp deja de enviar SMS. La consultora Ovum ha cuantificado esta pérdida de ingresos de las telecos a escala mundial: 6.500 millones de euros en 2010 y 10.400 millones en 2011.
La caída de la facturación por SMS fue casi del 6% en el año 2010 y del 9% en 2011, y tiene todas las trazas de continuar.
Según el informe de Ovum, las operadoras no deberían considerar la mensajería social como una amenaza sino como una oportunidad, puesto que son las que mantienen la relación con el cliente a través del número de teléfono incorporado en la tarjeta SIM y de los datos de facturación. Es debido a ello que las telefónicas agrupadas en el consorcio GSMA se afanan en poner a punto su propia plataforma de mensajería móvil a través de Internet, denominada RCS-e, que Movistar, Vodafone y Orange presentarán en el Mobile World Congress de la semana próxima en Barcelona.
:
