Llevas razon en mucho de lo que comentas Luisito, lo unico que nos queda en las cuencas es que las minas en las que aun sea minimamente rentable sacar carbon, se pueda hacer a unos costes mas o menos razonables, porque llevamos tiempo diciendo que en algunas minas aun quedan muchas toneladas de carbon, y lo que no se entenderia en estas zonas mineras, es que España se quedara a expensas de quedar sin carbon importado ni gas, o que sus precios fueran desorbitados, que tal y como estamos observando hacia donde va la economia no deberia extrañarnos.
Podemos quedarnos sin cine, pero creo que quedarnos sin el poco carbon nacional que tenemos seria un mal plan. A no ser que las termicas se alimenten bien con algunas peliculas infumables.
El carbón podría alcanzar en el futuro precios internacionales desorbitados pero el conservar abiertas minas españolas severamente deficitarias no nos libraría de esos precios desorbitados.
Supongamos que los precios del carbón en los mercados internacionales alcanzasen los 450 dólares por tonelada.
Las eléctricas y otros consumidores españoles tendrían que pagar entonces 450 dólares por tonelada porque ese sería el precio de comprar carbón de importación y también ese sería el precio de comprar carbón de las minas españolas. El motivo de esto último es muy simple: si esas minas españolas podrían exportar a los mercados internacionales a 450 su carbón ¿Por qué iban a vendérselo a 350, perdiendo 100 dólares por tonelada, a las eléctricas españolas?
Podría parecer que el sortilegio de lo público y de la nacionalización podría cambiar esto pero, lo cierto, es que no lo cambia.
Supongamos que esas minas son (de nuevo) nacionalizadas y se convierten en parte del sector público propiedad de los contribuyentes.
Supongamos que el precio internacional del carbón alcanzase los 450 dólares por tonelada pero que producir una tonelada en las minas estatales españolas tuviese un coste de solo 280 dólares por tonelada (Esto es ciencia-ficción pero supongamos que ocurriese)
¿Podrían esas minas estatales suministrar ese carbón a las eléctricas españolas a 280 dólares, a precio de costo, sin que eso supusiera una subvención a esas compañías privadas por parte de los contribuyentes?
No, para que ese carbón no estuviese subvencionado a costa de los contribuyentes tendría que ser vendido a las eléctricas a los precios internacionales de 450 dólares.
La explicación de esto es simple: supongamos que se producen en las minas estatales 10 millones de toneladas. Si los contribuyentes, que son los propietarios de esas minas, venden ese carbón en los mercados internacionales, obtienen 4.500 millones de dólares al año. Si venden ese carbón a las eléctricas a 280 dólares tonelada, solo obtienen 2.800 millones de dólares.
Esto hace que los contribuyentes pierdan 1.700 millones de dólares que podrían haberse dedicado a financiar el gasto en sanidad, por ejemplo. Para compensarlo, y mantener el mismo gasto sanitario, los contribuyentes tendrán que pagar 1.700 millones adicionales en impuestos, de tal forma que el sistema termina siendo un esquema en el que los contribuyentes pagan 1.700 millones más de impuestos para lograr que las eléctricas paguen 1.700 millones menos por el carbón que consumen.
Esto es una vulgar subvención de 1.700 millones a las eléctricas a costa de los contribuyentes.
