Sólo quiero que el psoe se abstenga parcialmente para que España no tenga que depender de los separatistas, veo que para tí las razones para despreciar al PP son objetivas pero mis razones para despreciar al psoe no lo son .Tenéis un lumbrera como líder que por su culpa hemos repetido las elecciones y otra vez por su culpa se pueden volver a repetir , será recordado en la historia como el Dr. No alias el negao, el que terminó de hundir al psoe.
---------- Post added 30-ago-2016 at 15:17 ----------
Tú has votado siempre a la peor izquierda pues no das para más, y te vuelvo a repetir que rebuznar es lo que hacéis tú, tu familia y tus amigos.
A ver si queda claro, porque yo lo veo muy sencillo.
El PSOE no tiene ni la obligación jovenlandesal, ni ética, ni de ninguna de clase a la hora de apoyar (por activa o por pasiva) al PP en la tarea de la formación de Gobierno.
Es este un hipotético gobierno que no representa los intereses de la ciudadanía y especialmente, de la clase obrera, el principal activo de un país. La gente vota al Partido Socialista Obrero Español y no al Partido Español.
Se podría pretender, por consiguiente, que si la gente votase al Partido Español, siendo que este no tendría diferencias objetivas con el resto de partidos (pues partidos son todos, así como españoles), el Partido Español se abstuviese para garantizar un Gobierno débil (por depender de la voluntad de otros) y poco estable (por estar sujeto a la confianza de los que lo apoyaran). Sin embargo, el PSOE no puede renunciar a la mitad de sus siglas y ha de velar, puesto que es su deber, por el interés de las clases trabajadoras de este país (incluso de aquellas que, perdiendo la conciencia de clase, apoyan al PP).
Los separatistas han sido siempre separatistas. También en el 96 cuando Aznar pactó con ellos y, fruto de ese pacto, hoy no tenemos mili, entre otras cosas. Así mismo, los separatistas también eran separatistas hace semanas cuando se consiguió una mayoría absoluta para fijar la composición de la mesa del Congreso.
Hace escasamente unos meses, el candidato del PP despreció la figura institucional del Jefe del Estado y no se presentó a una sesión de investidura que le correspondía, aduciendo falta de apoyos. En su lugar, lo hizo Pedro Sánchez con un acuerdo con Ciudadanos que Podemos no apoyó. La responsabilidad de la repetición de elecciones recayó entonces en Mariano Rajoy, por haber ignorado el mandato del Jefe del Estado y de las urnas, y en Pablo Manuel Iglesias por no apoyar un pacto que estaría hoy poniendo fin a los recortes y habría mandado al PP a la oposición.
Que se repitan las elecciones es el menor de los problemas de este país. Urge la constitución de un Gobierno fuerte (conformado por un partido en mayoría o una mayoría de partidos) que tenga un carácter progresista y haga a España salir de la crisis de la mano de su pueblo, de la mano de esas clases trabajadoras que constituyen la mayoría de la población. Urge por dos razones: para solventar la situación de emergencia social a la que se enfrentan muchos cabezas de familia, a los que se somete a la peor de la humillaciones; trabajar treinta días en el mes y no poder proporcionar a su familia las necesidades básicas treinta días en el mes, y para frenar el redoble de tambores secesionistas que siempre surge en el seno de un Gobierno del Partido Popular.
Por todo ello, el PSOE cumplirá su promesa electoral de votar NO a Rajoy para buscar un cambio que urge. Si ello nos condena a la repetición de elecciones, bienvenidas sean. Si tal repetición condena al PSOE a su destrucción ( interpretación irreal y en sentido contrario a lo que predicen los verdaderos expertos) se aceptará con el convencimiento de que se hizo lo mejor para el país y bajo la bandera de la defensa de los ideales y la democracia, eje que es o debe ser conductor de las ideologías y los partidos, que no son más que instrumentos al servicio de las primeras.
Si el PP quiere los votos del PSOE para renunciar a sus ideales y deshacer todo lo que ha hecho en estos cuatro años, evidenciando así su mala gestión; eso no será una realidad, por mucha presión que se le eche encima al PSOE.
