Los cables de telégrafo eran desnudos e iban por postes con aisladores.
Ahora toda la parafernalia de telecomunicaciones va con cables aislados cuando no enterrados, fibra óptica y con grandes mallas exteriores puestas a tierra.
También es verdad que crea cierta intranquilidad que si el telegrafo, una tecnología de lo más sencilla, se vió afectado ¿que podría pasar con la complicada tecnología de ahora?
Pero vamos que igual que se sobrevivió a aquel apagón sobreviviremos a otro, aunque tengamos que estar cinco dias "a oscuras"...al fin y al cabo en los ochenta no había casi ordenadores y se vivía.
Y dicho esto...¡a la guardería!!