Cuando tenía 17 años terminé el COU. Me puse a trabajar de camarero, luego de cocinero. Estudié ingeniería técnica, hice un MBA Executive con una beca, hice los 4 cursos de la escuela oficial de idiomas en inglés.
La verdad es que no me ha faltado trabajo nunca. En la esa época en el 2020 de la que yo le hablo ERTE, ERE, fruta calle y unos meses más tarde, ya con 59 tacos encontré mi actual trabajo, que no es muy bueno, pero me permite vivir de él y terminar de cotizar.
Recuerdo mi juventud con desagrado. Trabajar como un cabrón 10 ó 12 horas y luego aguantar insensateces en la universidad por parte de idiotas que se creían en la cima del saber y no eran más que monos de repetición que pretendían útiles insensateces como las que se estudiaban entonces (ahora no es muy diferente).
¿Ha merecido la pena? No lo tengo claro. Desde un punto de vista puramente profesional, nada de lo que me enseñaron me ha servido de una cosa, así de claro. El mundo real no funciona en derivadas parciales, sino en sumar y restar, por así decirlo. Más del 75% de los que tienen una titulación técnica se dedican a labores que no son nada técnicas o muy poco.
Ma parece que ha sido mucho más importante en mi vida, lo que llaman las "soft skills". Es más determinante en tu carrera cómo te comportas que lo que sabes. en el fondo lo que sabes no le importa a nadie. Sí les interesa cómo te desempeñas y cómo interactúas. Y estas son cosas que no se enseñan.
Recuerdo que trabajaba en una empresa en la que se formaban becarios. Cada 6 meses venía gente nueva. Chavales y chavalas que eran economistas o ADE y que estaban terminando el máster en comercio internacional.
Lo que aprendieron sobre el comercio internacional lo aprendieron en el stage de 3 meses. Cuando llegaban, ninguno conocía cómo funciona el IVA en ventas fuera de España, cómo se implementa una investigación de mercado, qué son las barreras arancelarias y no arancelarias, etc. Un puñetero economista, que seguro que sabe dos millones de insensateces que jamás le sirvieron a nadie.
Recuerdo que íbamos a recibir la visita de una empresa que quería ser nuestro distribuidor en Sudáfrica. Cogí a un becario, vente que vamos a preparar la reunión. tomamos los datos del país, el mercado potencial, el perfil de nuestro interlocutor. Preparamos un informe con nuestras ventas previas y contactos allí, etc. Al final, el chaval, con el que ahora me une una muy buena amistad me dijo que no imaginaba que una entrevista de una hora llevara un trabajo de tres o cuatro horas para prepararla.
Aprender a expresarse. el buen paño en el arca se vende. Eso decían los antiguos. Desde 1955 ó 1960 esto no es así. Las cosas toman un cariz u otro según cómo las comuniques. el mensaje es en un 10% el contenido y en un 90% la forma. Y esto no es algo que tú decidas, es, simplemente, así. Y tú tienes que trabajar ese 90%. el 10% de skills profesionales tampoco te lo da la universidad, porque una parte importante de lo que te cuentan es obsoleto o, incluso falso. Así que, tener un título universitario te sirve de forma muy limitada. Te sirve cuando sea obligatorio y cuando sea un filtro pasa/no pasa.
En el resto de las ocasiones, es posible que te quite tiempo para aprender lo que de verdad te importa.