La asistente social les ha dicho que "ellos no están para eso", que denuncien.
En cuanto a lo de desconfiar, tu misma. Al niño le aprobaron la ESO por pena de la madre, que estaba en el instituto dos veces por semana (para enterarse de qué deberes y exámenes tenía su hijo, que mentía sistemáticamente), y después se metió en un módulo de administrativo o algo así que se dejó porque "estaba harto de estudiar y lo que quería era trabajar, y si no le dejaban trabajar se iba a tirar por la ventana". Obviamente, una vez que se dejó el módulo se dedicó a tocarse las narices a dos manos y a no echar un p. curriculum. La madre, echando los curriculos ella y pidiendo favores a todo quisque, le ha encontrado ya tres trabajos. Los dos primeros no le gustaron al señorito, y el tercero es en un hotel del que le llaman para hacer días de camarero (el mes pasado tres días, este ninguno, y así)