"¿Tú realmente crees que un mamotreto de una tonelada y media a 45 km/h contra un cuerpo deformable de apenas 60 kg y en movimiento al que enviste y hace volar por los aires va a dejar daños visibles?"
"Se estima que una piedra de granizo de 1 cm (0,4 in.) cae a 9 m/s (20 mph). Mientras que una piedra grande puede alcanzar hasta los 60 m/s (134 mph). El granizo de más de 1,5 cm (0,6 in.) puede ocasionar daños."
Esther estaba más cerca de los 70 Kg que de los 60 Kg por lo que han comentado. Según la teoría de la UCO el golpe se habría concentrado en la aleta delantera derecha. En una simulación realista el cuerpo al salir despedido hacia atrás habría golpeado con la cabeza el capó y probablemente la luna.
Si una piedra de granizo que apenas pesa es capaz de dejar un bollo en la carrocería. ¿De qué estamos hablando si se trata de una cabeza que pesa varios Kgs y golpea a una velocidad mayor? No hace falta tener los conocimientos de física frescos. Con un poquito de sentido común llega.
La respuesta a la pregunta "¿Por qué la Guardia Civil se atrevió a cometer un fraude con la simulación del atropello?" es evidente: porque una simulación no fraudulenta dejaría claro que los desperfectos en el T-ROC no son compatibles con ningún atropello.
El fraude que cometieron en el caso Asunta con la simulación de las condiciones lumínicas en la pista forestal coló porque no era algo evidente. Lo que han hecho con la simulación no tiene disculpa posible y lo ve hasta un ciego:
No hay bemoles a que nadie defienda que la simulación está bien hecha y es válida ante un tribunal. Por lo tanto se tienen que depurar responsabilidades (desde los agentes que la hicieron hasta los mandos que la dieron por buena y la presentaron para que constara en el sumario) y alguien se tiene que responsabilizar de esa simulación (eso sí que es un atropello a los derechos y a la justicia) y pagar.