Aprovecho para retomar este tema un mes después.
Las calles se ven llenas de vida, la gente se muestra alegre y poco a poco se recupera el consumo. En mi barrio han abierto todos los chinos de alimentación. En otras zonas he visto que ya están abriendo establecimientos tipo kebab. Sin contar las cadenas de comida que no han cerrado en ningún momento y ya admiten clientes que piden para llevar.
Los burbumoris tendrán que esperar a la siguiente catástrofe, de esta ya estamos saliendo.