Catálogos de Tipo tuve algunos pero ya entrados los años 90. Me suena que eran más finitos pero no recuerdo que vendiesen juegos, me suena que eran de música sobre todo. Le echaré un ojo al archivo para refrescar la memoria.
Respecto a los joysticks, yo que en aquellos años era un acondroplásico me cabreaba mucho con los joysticks que había entonces para uso doméstico. No es que hoy en día en retrospectiva parezcan poco jugables y "rarillos" por decir algo, es que entonces ya lo eran con ganas.
Ibas a las recres, con aquellos mandos que parecían tanques a prueba de bombas, con un tacto y una jugabilidad "profesional", y cuando llegabas a casa y te ponías a jugar con aquellos mandos domésticos típicos de la época (tipo Atari 2600, el Phasor One, el Quickshot, el Konix Speedking, etc.) pues yo por lo menos me cabreaba y me generaba mucha frustración porque me parecían todos una fruta hez en comparación. No ya por la calidad de los materiales sino por la disposición de los botones que era incómoda y antiergonómica.
Le solía decir a mis amigos que saltaba a la legua que los que diseñaban esos joysticks no jugaban ellos mismos. Me imaginaba a unos señores mayores ("langostos", como diríamos ahora) diseñando joysticks "para los niños" que ni ellos mismos se molestaban en probar y de ahí salieron esas aberraciones, de gente que no había tocado una recreativa ni con un palo. Que ahora inspiran nostalgia por todas las horas que pasamos con ellos, pero que eran auténticas aberraciones.
A su favor hay que decir que a pesar de que estaban hechos de plástico, no muy bueno al tacto, en realidad estaban bien construidos y diseñados para aguantar tralla y durar muchos años. Los joysticks que conservo aún funcionan perfectamente, si acaso alguno ha perdido alguna ventosa que solía ser su punto débil, pero por lo demás aún en perfecto estado de funcionamiento.
Que yo recuerde el primer joystick doméstico y asequible que hizo las cosas bien fue el Quickshot Maverick, que ya venía con su mando a la izquierda y sus dos botones a la derecha, como en las recres. Además con una buena base con ventosas que le daban mucha establidad. Aunque el tacto seguía siendo muy plasticoso y de juguete, seguía a años luz del tacto de las recreativas.
El único que consiguió replicar el verdadero tacto de las recreativas fue el Telemach 200, una auténtica leyenda y que todavía se vende hoy por cierto, pero que entonces muy pocos tuvieron porque tenía un precio prohibitivo y un nivel de exclusividad parecido al de la NeoGeo.