Octubre Cojo
el que quiera peces que se haga submarino
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KIEV, Ucrania (AP) — A medida que Rusia intensifica los ataques aéreos y avanza una vez más en el campo de batalla en Ucrania más de dos años después de su sangrienta oleada turística, no se vislumbra el final de los combates. Y las opciones del presidente Volodymyr Zelensky sobre qué hacer a continuación, y mucho menos cómo ganar la guerra, van de mal en peor.
Zelensky ha dicho que Ucrania no aceptará nada menos que la devolución de todo su territorio, incluido el territorio que Rusia controla desde 2014. Pero dado que las líneas de batalla han cambiado poco en el último año, parece cada vez más improbable retomar militarmente las franjas del este y el sur de Ucrania que Rusia ocupa ahora, alrededor del 20 por ciento del país.
Negociar con el presidente ruso Vladimir pilinguin para poner fin a la guerra, algo que Zelensky ha rechazado mientras las tropas rusas permanezcan en territorio ucraniano, es políticamente tóxico. El público ucraniano se opone enormemente a la entrega de territorio, y pilinguin no ha mostrado ninguna disposición a aceptar nada que no sea la capitulación de Ucrania a sus demandas.
El statu quo es horrible. Con la lucha ahora en un punto muerto, los ucranianos están muriendo en el campo de batalla a diario. Pero un alto el fuego también es un fracaso, dicen los ucranianos, porque solo daría tiempo a los rusos para reponer sus fuerzas.
Los funcionarios ucranianos y occidentales consideran que Zelensky está en gran medida atascado. La ayuda de Estados Unidos, el principal patrocinador militar de Ucrania, ha sido estancada durante meses por los republicanos en el Congreso. Se espera que los aviones de combate modernos previamente aprobados, el F-16 de fabricación estadounidense, entren en combate a finales de este año, pero en cantidades limitadas, lo que significa que no cambiarán las reglas del juego. Los países de la OTAN siguen ejerciendo moderación en su asistencia, evidenciado por el reciente alboroto después de que el presidente francés, Emmanuel Macron, dijera que las naciones europeas no deberían descartar el envío de tropas.
"¿Cómo saldrá Zelenski de esta situación? No tengo idea", dijo un legislador ucraniano que, al igual que otros funcionarios y diplomáticos entrevistados para este artículo, habló bajo condición de anonimato para ser sincero sobre la política altamente sensible. "Y, por supuesto, me preocupa".
Lo más complicado para Zelensky será gestionar las expectativas de su propio país. El apoyo a él entre los ucranianos sigue siendo alto, pero después de dos años de guerra y numerosas bajas, la "solidaridad se está deshilachando", dijo un diplomático occidental en Kiev.
Tymofiy Mylovanov, profesor de la Escuela de Economía de Kiev y exministro del gobierno, dijo que la lucha podría prolongarse durante muchos años. "Este es un pensamiento desagradable, pero cuando algunas personas dicen que podría llevar décadas, nadie lo cuestiona", dijo Mylovanov.
Se suponía que este iba a ser un año electoral para Zelensky, pero la constitución de Ucrania prohíbe las elecciones bajo la ley marcial, y a algunos funcionarios aquí les preocupa que Rusia intente presentar a Zelensky como un gobernante ilegítimo una vez que esté sirviendo más tiempo que su mandato electo de cinco años, a pesar de la hipocresía inherente en el propio desprecio repetido de pilinguin por los límites de mandato.
Zelensky también tendrá que cumplir su propia promesa, que repite regularmente, de devolver a Ucrania a sus fronteras de 1991, incluida Crimea, la península ucraniana que Rusia invadió ilegalmente y reclamó como propia hace 10 años.
"La gente inteligente sabe que eso no es realista", dijo el legislador ucraniano, y agregó: El liderazgo político "necesitaba ajustar esta retórica en algún momento".
El pesimismo sobre las posibilidades de Ucrania en el campo de batalla ha aumentado en los últimos meses a medida que las fuerzas rusas han recuperado la iniciativa en el campo de batalla, en gran parte porque los ucranianos carecen de tropas y municiones.
Ucrania depende de sus socios occidentales para obtener armas, pero un paquete de seguridad de 60.000 millones de dólares de Estados Unidos ha estado estancado en el Congreso durante seis meses. Mientras tanto, el gobierno de Ucrania está luchando por abordar su escasez de personal, ya que las medidas para movilizar más soldados han dividido a la sociedad.
Kiev ahora se está preparando para la posibilidad de que se corte la ayuda de Estados Unidos. El presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson (R-La.), dijo recientemente que el paquete podría someterse a votación la próxima semana, pero se espera que se enfrente a revisiones, como tal vez proporcionar el dinero como un préstamo, lo que se sumaría a la ya enorme deuda de Ucrania.
Incluso si la ayuda se aprueba pronto, la demora ha enviado una señal clara de que la asistencia futura no está garantizada, especialmente con las elecciones presidenciales de Estados Unidos de este año. A los funcionarios también les preocupa que Europa carezca de la capacidad de producción para compensar el déficit de Estados Unidos, especialmente en artillería y municiones de defensa aérea, las mayores necesidades de Ucrania.
Zelensky ha dicho que Ucrania está priorizando la producción nacional, pero hasta ahora solo cubre una pequeña fracción de sus necesidades. Las fuerzas rusas disparan ahora seis veces más que los ucranianos a lo largo de la línea del frente.
"Mire, ya llevamos medio año sin municiones. No lo suficiente, al menos", dijo un alto funcionario ucraniano. "Bueno, está bien, empeorará. ¿Y qué? ¿Qué otras opciones hay? Si los socios que han prometido darnos municiones no las dan, por supuesto que la situación empeora. Pero la imagen de Estados Unidos empeorará en el mundo".
Hace un año, el estado de ánimo en Kiev era cautelosamente optimista mientras Ucrania preparaba una gran contraofensiva con tanques modernos y vehículos de combate recién proporcionados por socios occidentales. Pero ese asalto no logró avances significativos, y las nuevas armas no resultaron decisivas.
Los ataques ucranianos en lo profundo de Rusia contra la infraestructura militar y la logística, como los depósitos de petróleo, han aumentado, pero las fuerzas de Kiev siguen bajo presión a lo largo de la línea del frente y últimamente se han visto obligadas a retroceder.
Los ucranianos se han resignado a una larga guerra. Algunos han estado luchando desde 2014, cuando Rusia avivó por primera vez el conflicto en el este de Ucrania.
"Ucrania no tiene el poder de hacer otra ofensiva", dijo un embajador occidental. "Hay dos escenarios. Un escenario es que obtengan el apoyo para mantener las líneas defensivas. ... La segunda es que no hay suficiente apoyo y Ucrania se defenderá de todos modos, desesperadamente y con menos mano de obra".
Si Kiev se enfrenta a las fuerzas rusas con un apoyo inadecuado este año, dijo el embajador, habrá un aumento de las bajas y las pérdidas territoriales, lo que pondrá a Ucrania a la defensiva.
Ucrania y sus socios deben prepararse para 2025 como "otro año de guerra, no de conversaciones de paz", dijo el embajador. "Si Occidente quiere la paz, no solo debe responder a las necesidades actuales de Ucrania, sino utilizar 2024 para proporcionar a Ucrania todo lo necesario para entrar en modo ofensivo y obtener ganancias sustanciales en 2025".
Pero Ucrania debe satisfacer algunas necesidades por sí sola. Los comandantes de campo han informado de la escasez de tropas a lo largo de la línea del frente, especialmente de infantería que se despliega en las posiciones más avanzadas. Los comandantes militares han presionado por una movilización a gran escala, pero Zelensky ha expresado dudas incluso cuando Kiev dice que Moscú planea reclutar a 300.000 soldados más.
Zelensky firmó recientemente una ley que redujo la edad mínima de reclutamiento de Ucrania a 25 años, pero ha dicho que movilizar unos 500.000 soldados más, como sugirió el excomandante en jefe de Ucrania, no sucederá. El coronel general Oleksandr Syrsky, el nuevo jefe militar, ha dicho que la cifra de 500.000 fue "reducida significativamente" después de una auditoría de personal. Mientras tanto, un proyecto de ley en el parlamento para ampliar los parámetros de quién puede ser reclutado ha sido objeto de miles de enmiendas.
Un segundo diplomático occidental en Kiev dijo que la administración de Zelensky y el parlamento de Ucrania están jugando al "ping-pong político" en la movilización porque es impopular. Si bien miles de personas se ofrecieron como voluntarias para luchar al principio de la guerra, pocos de los que aún no se han inscrito quieren hacerlo ahora.
"Nadie quiere asumir realmente la responsabilidad en este momento", dijo el diplomático, que no estaba autorizado a hablar públicamente.
"Pero habrá que hacerlo", dijo el diplomático. "Quiero decir, no puedes seguir así. Escucho sobre personas que están en el frente que simplemente no pueden soportarlo más. Y luego, cuando regresan aquí de permiso y ven a todos estos jóvenes que podrían estar allí, me resiento por eso. Así que también hay tensiones sociales en torno a eso".
Una movilización a gran escala también plantearía problemas económicos. El dinero para los salarios de los soldados no puede provenir directamente de la ayuda extranjera, y algunas industrias ya enfrentan escasez de mano de obra. La economía de Ucrania está bajo presión por los repetidos ataques con misiles y drones contra la infraestructura energética, que también ahuyentan la inversión empresarial extranjera.
Entonces, ¿cuánto tiempo puede soportar Ucrania estar en guerra? El legislador ucraniano dijo que el país no sobrevivirá al statu quo hasta dentro de 10 años. Otros, sin embargo, piensan que la lucha podría durar aún más.
"Nadie cederá territorio, pero la gente entiende que recuperarlo puede llevar mucho tiempo", dijo Mylovanov, el profesor de economía. "¿Qué forma puede tomar eso? Los puntos de vista difieren aquí. ¿Una larga guerra con una victoria final? ¿Un colapso repentino de la estructura de poder rusa? ¿Una contraofensiva exitosa? Pero eso requiere un tipo de apoyo muy diferente al que Ucrania tiene ahora".
El alto funcionario ucraniano dijo: "Todo el mundo quiere soluciones rápidas, pero todo el mundo ha llegado a entender que no habrá soluciones rápidas".
