El Gran Cid
Madmaxista
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En primer lugar: ¿a que no sabías esto?:
Las leyes de la UE ya permiten que sus estados miembros se otorguen a sí mismos, individualmente, certificados de emergencia para las banderillas, pero al hacerlo, son los únicos responsables si algo sale mal. Sin embargo, cuando las banderillas reciben autorización de emergencia de las propias instituciones de la UE, las empresas farmacéuticas son responsables de su uso.
En segundo lugar y lo más importante:
La Comisión Europea ha argumentado hasta ahora que debe evitarse una situación en la que los países de la UE otorguen a cada uno un permiso de emergencia para una banderilla u otra, y ha advertido que tales permisos podrían reducir la capacidad de los reguladores para probar la eficacia y seguridad de las banderillas.
Exactamente lo que está pasando ahora, ya que son los países miembros los que están autorizando de emergencia la banderilla.
Y en tercer lugar, la parte del artículo que se ciñe al titular de este hilo:
La UE continúa buscando formas de acelerar su campaña de vacunación, que hasta ahora ha progresado con pereza, y hoy (martes) la Comisión Europea reconoció por primera vez que está considerando cambiar su política y emitir permisos de emergencia más rápidos para nuevas banderillas desarrolladas contra el bichito. Hasta ahora, la comisión ha obligado a las compañías farmacéuticas a pasar por un proceso particularmente meticuloso y complejo en el camino hacia la obtención de la aprobación deseada.
En conclusión: nuestros queridos países están socavando nuestra seguridad de manera descarada y, además, salvando a las farmacéuticas de futuras multimillonarias indemnizaciones.
הקמפיין תקוע, אירופה שוקלת אישור מהיר לחיסונים
Las leyes de la UE ya permiten que sus estados miembros se otorguen a sí mismos, individualmente, certificados de emergencia para las banderillas, pero al hacerlo, son los únicos responsables si algo sale mal. Sin embargo, cuando las banderillas reciben autorización de emergencia de las propias instituciones de la UE, las empresas farmacéuticas son responsables de su uso.
En segundo lugar y lo más importante:
La Comisión Europea ha argumentado hasta ahora que debe evitarse una situación en la que los países de la UE otorguen a cada uno un permiso de emergencia para una banderilla u otra, y ha advertido que tales permisos podrían reducir la capacidad de los reguladores para probar la eficacia y seguridad de las banderillas.
Exactamente lo que está pasando ahora, ya que son los países miembros los que están autorizando de emergencia la banderilla.
Y en tercer lugar, la parte del artículo que se ciñe al titular de este hilo:
La UE continúa buscando formas de acelerar su campaña de vacunación, que hasta ahora ha progresado con pereza, y hoy (martes) la Comisión Europea reconoció por primera vez que está considerando cambiar su política y emitir permisos de emergencia más rápidos para nuevas banderillas desarrolladas contra el bichito. Hasta ahora, la comisión ha obligado a las compañías farmacéuticas a pasar por un proceso particularmente meticuloso y complejo en el camino hacia la obtención de la aprobación deseada.
En conclusión: nuestros queridos países están socavando nuestra seguridad de manera descarada y, además, salvando a las farmacéuticas de futuras multimillonarias indemnizaciones.
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