En un informe publicado por JP Morgan esta misma semana se hacía referencia a las posibles turbulencias a las que se iba a enfrentar la deuda subordinada de Deutsche Bank en los mercados tras el caos financiero en EEUU y Europa. "En nuestra opinión, el proceso de eliminación de riesgos podría seguir siendo muy desafiante, lo que significa que los diferenciales bancarios al menos seguirán siendo amplios", aseguran los analistas de JP Morgan. En EEUU, la banca mediana y pequeña
se enfrenta a una salida masiva de depósitos que tiene en el First Republic Bank su mayor representante.
Hay que tener en cuenta que la situación aún no es igual ni mucho menos. Las turbulencias para la entidad alemana tienen lugar en la deuda subordinada: "La deuda subordinada son títulos valores de renta fija con rendimiento explícito emitidos normalmente por entidades de crédito que ofrecen una rentabilidad mayor que otros activos de deuda. Sin embargo, y como no podía ser de otra manera según las leyes financieras implícitas, esta mayor rentabilidad se logra a cambio de perder capacidad de cobro en caso de extinción y posterior liquidación de la sociedad, ya que está subordinado el pago en orden de prelación en relación con los acreedores ordinarios", comentan desde BBVA.
Muchas dudas en la banca
Las turbulencias en la banca continúan.
Parecía que la compra de UBS por parte de Credit Suisse calmaría las aguas, pero no ha sido así. La adquisición contemplaba un agravio a los bonistas de mayor riesgo frente a los accionistas, no viendo ni un céntimo en una inusual vulneración del habitual orden de prelación. Esto ha generado más dudas en el sector.