Como ahora les sale gratix delinquir, hacen lo que les sale de los ovarios!
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Los hechos que voy a relatar, pese a lo increible que puedan parecer, son totalmente veridicos. Las personas sensibles, aquellos con problemas cardiacos, los que creen en la virtud humana y tico no deberian de continuar leyendo.
Hoy, tras un festin consistente en un pure de patata de sobre con garbanzos y una hamburguesa con queso, me he dirigido como de costumbre a mi biblioteca mas proxima para proseguir con mis estudios.
Al cabo de un rato de duro estudio, me he levantado de la silla con destino los aseos, dejando a su suerte las fotocopias grapadas, dos bolis bic cristal (uno azul y otro rojo) y la chaqueta, con la tranquilidad que da el saber que siendo pobre poco te van a poder robar.
Al regresar de los baños, he advertido como delante de mi aun caliente silla, se sentaba un pibon. Mientras me acercaba distraido contemplaba sus formas mientras ella se contorsioneava para sacar cosas de su mochila, entre ellas sus montones de apuntes (sobre leyes), un aipod, la calcu, y un portatil de aspecto nuevo y caro.
Cuando me he sentado en mi silla, a fin de observar frente a mi y en primer plano el balcon que lucia, he advertido una extraña perturbacion en el espacio-tiempo.
Mi boli bic azul no estaba.
Casualmente, y casi tocandole los pechos, habia sobre la mesa un boli bic azul que coincidia con la descripcion del mio. Su estuche, situado sobre la mesa, estaba todavia cerrado, y ella todavia estaba iniciando el SO de su computador. La mesa era lo suficientemente amplica, como para que mi boli no hubiese viajado hasta la sombra de sus ubres por voluntad propia.
Como soy despistado y bienpensado, varias hipotesis han rebotado en mi encefalo. ¿Una nueva tecnica para ligar? No parecia un motivo de peso, la jaca en cuestion no necesitaba tecnica alguna, ademas de que habia hurtado mi boli antes de conocer nada acerca de mi agraciado aspecto fisico. ¿El boli no era el mio? Bastante posible, aunque recordaba haberlo sacado de la mochila, lo cierto es que no lo habia utilizado en toda la tarde, ya que el rojo cumplia a la perfeccion su comentido. ¿Alguien ha querido tenderle una trampa a la pobre moza? Puede, pero deberia de darse cuenta de que esta aplastando con sus senos algo falico que no le pertenece.
En fin, he continuado con mi estudio sin decir nada, a ver si se daba cuenta y decia algo. Pero nada, coge mi boli, mi boli bic azul con su carga de tinta casi al completo, y se pone a usarlo como si fuera suyo...
Empiezo a dudar... las anteriores preguntas vuelven a mi cabeza... ¿quiere ligar? Espero a ver si haciendose la sencilla inicia una conversacion con un "uy perdona esta cosa larga dura y con capucha creo que es tuya", o al menos que mire mis sensuales ojos de forma lujuriosa mientras muerde el boli. Pero nada, de hecho rehuye la mirada en un claro signo de culpabilidad. Ya que estoy demasiado bueno como para tenerme tan cerca y no mirarme. Ademas, tampoco puede ser boyera. He visto suficiente prono lesbico para distinguir a una boyera de una impostora. ¿no es mi boli? A simple vista concluyo que las incisiones en el capuchon del boli coinciden con mi dentadura. Ademas la chica evita en todo momento morder el boli o meterselo en el balcón, por lo que no solo conluyo que no es suyo, sino que ademas lo sabe. Ademas, como prueba concluyente, cuando por fin abre el estuche para sacar algo, lo deja abierto. Asi que no es de las que cierra es estuche despues de sacar algo. Todo apunta en la misma direccion. El boli es mio, y ella lo sabe (estudia leyes, asi que lo sabe), y quiere quedarselo. Queda por lo tanto descartada la opcion de una trampa tendida por una tercera persona.
Todo estos sesudos analisis los hago mientras en otro hilo continuo estudiando (multitasking). Cuando por fin concluyo en que he sido victima de un robo, al mismo tiempo que conluyo el estudio de la materia, recogo mis cosas, las meto en la mochila, y espero pacientemente a que ella termine de escribir. Levanto el brazo y deforma diplomatica digo: "Ese boli que usas con alegosia y nocturnidad (el sol se oculto en ese momento) creo que es mio, ¿podria ser?"
A lo que la visillera en 4 rapidos movimientos y articulaciones vocales dignas de una entrenada cajera de supermercado, me dice; "uy, puede ser", me lo da, y despues mientras dice "tengo otro aqui", mete mano a su estuche y saca otro boli bic azul (con la mitad de tinta).
Obviamente, me habia robado el boli. Se estaba quedando sin tinta, y al ver mi reluciente boli casi nuevo "abandonado" en la mesa, no ha podido resistir el impulso cleptomano. Y mas sabiendo que la ley las respalda. Seguramente se creia que no seria capaz de reclamar lo que es mio, ya que una simple amenaza leve podria haberme enviado a chirona. Pero ella no sabia que podria reprimir mi furia y hacer gala de mi diplomacia para reclamar mi pertenencia.
En fin, hamijos. Como podeis ver, un hecho indignante y lamentable protagonizado por una feminista radical que sabe (ya que la estudia) que la ley la protege y tiene carta blanca pa robar en esta epoca pre-madmax, donde hasta por un boli repleto de tinta te pueden apuñalar.
No se si volvere por la biblioteca.
Tengo miedo de que la proxima vez que vaya a los baños pueda cogerme un grupo de feministas radicales, meterme en el servicio femenino, violarme inpunemente, y luego denunciarme a mi.
Tenemos que hacer algo... esto se nos esta escapando de las manos..