Radiopatio
Heaven or Las Vegas
No, para nada lo interpreté como una alegoría del suicidio. Yo soy más de ensalzar lo que consideramos insignificante, y es que muchas personas se amargan por no cumplir sus expectativas, e incluso creen estar despojadas de algo tan básico como es el afecto, o nunca ven resultados positivos que confirmen que lo que hacen es lo correcto, que lo que hacen es sensato mientras se pegan una leche tras otra y se frustran, avivando sentimientos negativos, destructivos; autocompadeciéndose y tildándose como seres malditos, débiles, prescindibles.A ver. Yo creo que he tenido la fortuna de "hacer el bien" y posiblemente pueda seguir haciéndolo. También he hecho daño, aunque el balance es claramente positivo hacia "el bien".
Mi reflexión no es una alegoría del suicidio, más bien de "la aceptación". De relativizar los problemas y situarlos en un contexto. Ese contexto es que somos como hormigas en un hormiguero. Lo más importante es el hormiguero, la supervivencia de la colonia de hormigas. Individualmente uno hace lo que puede.
Últimamente, cuando voy a algún sitio donde hay aglomeraciones humanas, como el Carrefour, el Media Mark o sitios por el estilo, soy más consciente de "la insoportable levedad del ser". Todas esas personas, que valen tanto o más que tú mismo, que tienen el mismo derecho a respirar el aire que nos rodea...
Aunque el balance de tus actos parece que no trasciende, lo hace; mucho. Somos tan "insignificantes" como aquello que nos hace feliz y que ignoramos sistemáticamente porque nos creamos necesidades artificiales que nos superan y son difíciles de satisfacer.
A mi me empequeñece estar en una multitud o bajo el cielo en una inmensa llanura, y no por ello pensar que -a pesar de mi levedad- apenas tengo valor como persona. Es el valor que tenemos todos, y que nos obstinamos en pisotear cuando las cosas van mal dadas.