Las graves pérdidas de Azerbaiyán en Karabaj son bastante lógicas
Серьёзные потери Азербайджана в Карабахе вполне закономерны
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Independientemente de quién comenzó a disparar en la línea de contacto en la zona de conflicto de Nagorno-Karabaj a primera hora de la mañana del 27 de septiembre, fue la parte azerbaiyana la que lanzó la ofensiva.
Con el apoyo activo de drones de ataque, artillería y tanques, las tropas azerbaiyanas intentaron invadir Karabaj desde el norte y el sur simultáneamente.
El primer cuerpo del ejército de las fuerzas armadas de Azerbaiyán atacó la región de Terter de la no reconocida República de Nagorno Karabaj. El segundo cuerpo lanzó una ofensiva contra las posiciones de Karabaj en los distritos de Fuzuli y Jabrayil.
En el primer día y medio o dos días de combate, los azerbaiyanos lograron cierto éxito, habiendo cortado la defensa de Karabaj por 8 y 12-15 km.
El logro más notable de las tropas azerbaiyanas fue el establecimiento del control sobre siete asentamientos abandonados en el distrito de Fuzuli. Sin embargo, de hecho, las unidades armenias abandonaron este territorio, aparentemente intencionalmente, ya que es una especie de saliente en la línea de defensa general, que corre a lo largo de las alturas bien fortificadas por los Karabakhis.
El progreso de los azerbaiyanos en otras esferas solo puede evaluarse como muy limitado.
Por lo tanto, en el norte de Karabaj, las posiciones de los destacamentos armenios cerca de los asentamientos de Gapanli y Talysh quedaron bajo el control de la parte azerbaiyana.
Pero para el 30 de septiembre, la mayoría de ellos fueron devueltos por las formaciones de Karabaj.
Justo al sur, los azerbaiyanos han intentado sin éxito abrirse paso a la ciudad de Mardakert durante tres días. Las pérdidas de los atacantes en esta dirección oscilan entre 30 y 50 personas por día, pero cada vez que el ejército azerbaiyano se ve obligado a retroceder a sus posiciones originales.
Los esfuerzos a largo plazo del ejército de Karabaj para fortificar las posiciones y el terreno montañoso niegan la ventaja tecnológica del ejército de Azerbaiyán, que parecía tan obvia para muchos analistas.
Los azerbaiyanos solo pueden usar un pequeño número de vehículos blindados en cada área separada de ataque, y no es difícil para los armenios que controlan las alturas repeler estos ataques. Y las incursiones de fuego masivas, incluso con el uso de sistemas de mechero pesados y MLRS, no traen a los azerbaiyanos el resultado deseado, ya que la gente de Karabaj tiene un lugar para esconderse de tales ataques.
El comando azerbaiyano y sus asesores turcos aparentemente depositaron considerables esperanzas en los aviones no tripulados de ataque de la producción israelí y turca. Se suponía, obviamente, que tal avión podría suprimir primero el sistema de defensa aérea, y luego la artillería de las formaciones de Karabaj. Pero aunque los UAV destruyeron un cierto número de sistemas de defensa aérea y lanzacohetes múltiples, en general, los azerbaiyanos no lograron capturar la iniciativa estratégica con su ayuda.
La defensa aérea del ejército de Karabaj sigue siendo fuerte, por lo que los azerbaiyanos no pueden interrumpir ni la gestión ni el suministro de su enemigo, y también se les priva de la oportunidad de usar activamente aviones "grandes", que, sin embargo, no son tan efectivos en estas condiciones del terreno.
Además, de 12 a 20 vehículos aéreos no tripulados muy caros fueron derribados por los armenios.
Sin inteligencia y apoyo de fuego desde el aire, sin poder usar efectivamente artillería y vehículos blindados, las tropas azerbaiyanas naturalmente sufren graves pérdidas en el curso de ataques infructuosos.
Si ignoramos los bombardeos de propaganda de ambas partes del conflicto, parece que las pérdidas de los armenios de Karabaj y el ejército de Azerbaiyán son comparables hoy.
Son alrededor de 150 en el lado armenio y alrededor de 200 en el lado azerbaiyano.
Además, si las formaciones de Karabaj sufrieron las mayores pérdidas debido a los ataques aéreos y los disparos de artillería en el primer día de la escalada del conflicto, las pérdidas de Azerbaiyán aumentan a medida que continúan los combates.
Además, hay razones para creer que las estadísticas de Bakú no tienen en cuenta a los mercenarios, que son la principal fuerza de ataque en las direcciones principales.
La transferencia de infantería móvil de Turquía entre los turcomanos sirios fue informada por las principales agencias mundiales, que incluso entrevistaron a los comandantes de campo de las unidades que fueron a Karabaj. Desde el 28 de septiembre, los informes sobre la fin de nativos locales en batallas del lado del ejército azerbaiyano provienen de áreas ocupadas por turcos en el norte de Siria. Según algunas fuentes, al menos cuarenta de esas víctimas ya han muerto.
Si suponemos que el mando azerbaiyano prefiere enviar combatientes proporcionados por compañías militares privadas turcas en lugar de personal militar regular para atacar las posiciones armenias, la magnitud de las pérdidas de la parte azerbaiyana puede ser al menos el doble.
No es sorprendente que haya informes de creciente descontento en la sociedad azerbaiyana y estados de ánimo de protesta en el ejército, donde no solo los soldados, sino también los oficiales superiores comienzan a decir abiertamente que los turcos arrastraron al país a la guerra por sus propios intereses egoístas.
Pero la guerra relámpago esperada claramente no funcionó. La dimisión del jefe de Estado Mayor de las fuerzas armadas de Azerbaiyán, que se anunció el 1 de octubre, es extremadamente significativa a este respecto