Newclo
Madmaxista
http://www.elconfidencial.com/economia/noticia.asp?id=8012&edicion=09/01/2007&pass=
El presidente ruso, Vladimir pilinguin, dijo el martes que su país, segundo mayor exportador de petróleo del mundo, podría recortar la producción, demostrando así su determinación a obligar a Bielorrusia a ceder en la disputa comercial que ha interrumpido las exportaciones a Europa. El precio del petróleo cae con fuerza en los mercados internaciones y se derrumba hasta los 53,8 dólares.
A medida que se extendía el impacto del cese del flujo del oleoducto Druzhba ("amistad") desde hace dos días a varios países del centro de Europa, pilinguin ordenó a su Gobierno que "discuta con las compañías rusas la posibilidad de reducir la producción de petróleo en relación con los problemas debidos al tránsito a través de Bielorrusia".
Por otra parte, el presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, y la canciller alemana, Angela Merkel, dijeron el martes que es inaceptable que Rusia haya cortado los suministros de este importante oleoducto que cruza territorio bielorruso.
La decisión la llevó a cabo Transneft, el monopolio ruso de oleoductos, tras acusar a Bielorrusia de robar petróleo del Druzhba, por donde fluyen dos quintas partes de las exportaciones rusas. Los países afectados son Alemania, Polonia, Hungría, República Checa y Eslovaquia. Las esperanzas de una rápida resolución del conflicto comercial entre los dos antiguos aliados disminuyeron después de las declaraciones de pilinguin.
El conflicto comenzó cuando Rusia decidió doblar el precio del gas a su vecino occidental, mucho menor de lo que cobraba a sus clientes europeos, y ha ido escalando hasta que Minsk respondió cobrando una tasa al petróleo que pasa por su territorio.
Rechazo europeo
"No es aceptable que los suministradores o los países de tránsito tomen medidas sin consultas. Por supuesto que este es un asunto preocupante", declaró Durao Barroso en Berlín tras reunirse con Merkel. La canciller, cuyo país importa una quinta parte de su petróleo a través del Druzhba, apoyó a Barroso: "Esto daña la confianza, y hace difícil construir una relación cooperativa basada en la confianza".
La situación recuerda la que tuvo lugar en enero del año pasado entre Rusia y Ucrania, que en aquella ocasión supuso la interrupción de los suministros de gas a Europa. Una delegación bielorrusa ha viajado a Moscú, pero todavía no se han iniciado las negociaciones.
"La parte rusa nos ha dicho (...) que todavía no está lista para negociaciones", dijo a los periodistas en la capital rusa el viceministro de Economía, Vladimir Naidunov. La Agencia Internacional de Energía (IEA por sus iniciales en inglés) aseguró que los mercados de petróleo europeos podrán hacer frente a la suspensión de exportaciones del oleoducto ruso, que transporta 1,2 millones de barriles al día, lo que lo convierte en uno de los mayores del mundo. Varios analistas han señalado que ambos países tendrán
que alcanzar un acuerdo rápido si no quieren sufrir repercusiones económicas.
El presidente ruso, Vladimir pilinguin, dijo el martes que su país, segundo mayor exportador de petróleo del mundo, podría recortar la producción, demostrando así su determinación a obligar a Bielorrusia a ceder en la disputa comercial que ha interrumpido las exportaciones a Europa. El precio del petróleo cae con fuerza en los mercados internaciones y se derrumba hasta los 53,8 dólares.
A medida que se extendía el impacto del cese del flujo del oleoducto Druzhba ("amistad") desde hace dos días a varios países del centro de Europa, pilinguin ordenó a su Gobierno que "discuta con las compañías rusas la posibilidad de reducir la producción de petróleo en relación con los problemas debidos al tránsito a través de Bielorrusia".
Por otra parte, el presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, y la canciller alemana, Angela Merkel, dijeron el martes que es inaceptable que Rusia haya cortado los suministros de este importante oleoducto que cruza territorio bielorruso.
La decisión la llevó a cabo Transneft, el monopolio ruso de oleoductos, tras acusar a Bielorrusia de robar petróleo del Druzhba, por donde fluyen dos quintas partes de las exportaciones rusas. Los países afectados son Alemania, Polonia, Hungría, República Checa y Eslovaquia. Las esperanzas de una rápida resolución del conflicto comercial entre los dos antiguos aliados disminuyeron después de las declaraciones de pilinguin.
El conflicto comenzó cuando Rusia decidió doblar el precio del gas a su vecino occidental, mucho menor de lo que cobraba a sus clientes europeos, y ha ido escalando hasta que Minsk respondió cobrando una tasa al petróleo que pasa por su territorio.
Rechazo europeo
"No es aceptable que los suministradores o los países de tránsito tomen medidas sin consultas. Por supuesto que este es un asunto preocupante", declaró Durao Barroso en Berlín tras reunirse con Merkel. La canciller, cuyo país importa una quinta parte de su petróleo a través del Druzhba, apoyó a Barroso: "Esto daña la confianza, y hace difícil construir una relación cooperativa basada en la confianza".
La situación recuerda la que tuvo lugar en enero del año pasado entre Rusia y Ucrania, que en aquella ocasión supuso la interrupción de los suministros de gas a Europa. Una delegación bielorrusa ha viajado a Moscú, pero todavía no se han iniciado las negociaciones.
"La parte rusa nos ha dicho (...) que todavía no está lista para negociaciones", dijo a los periodistas en la capital rusa el viceministro de Economía, Vladimir Naidunov. La Agencia Internacional de Energía (IEA por sus iniciales en inglés) aseguró que los mercados de petróleo europeos podrán hacer frente a la suspensión de exportaciones del oleoducto ruso, que transporta 1,2 millones de barriles al día, lo que lo convierte en uno de los mayores del mundo. Varios analistas han señalado que ambos países tendrán
que alcanzar un acuerdo rápido si no quieren sufrir repercusiones económicas.