notorius.burbujo
Madmaxista
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Lo que hay en ese agujero es demencial y cada vez está peor. En los casi 20 años que he ido, con mayor o menor frecuencia, no ha habido un solo día que algo no me sorprendiese y me estimulase al mismo tiempo. Tengo muy claro que la magia siempre aparece cuanto todas las normas sociales desaparecen.
Hace buena tarde, y me he saltado todos los protocolos, ya llevo 5 cervezas, y aunque no acostumbro a beber ni tomar nada entre semana por disciplina y por respeto a mis quehaceres, hoy es un día especial. Es San Valentín, y mi amada resulta que me dice que está conociendo a otro hombre y me mete en la friendzone de golpe, así que decido que su regalo va a ser devuelto y va a ser invertido en mejores menesteres. Al poco, me dice que su "chico" la ha dejado justo hoy, vaya, que casualidad. Sin embargo, decido que no voy a hacer el canelo ni voy a caer en sus juegos. Ni un paso atrás.
Primero voy a devolver el regalo, recibo el cash, y pongo rumbo al infierno de buena tarde-noche, que es cuando mejor entra el material. Cae el sol, y un suave y agradable viento se mezcla con el polvo en suspensión que levantan las kundas al pasar. El poblado estaba animado, con mucha vida y energía, algo que hace muchos años que no veía, lo cual me aporta una chispa de esperanza. Hay cada vez mas y mas puntos de venta, se nota que la policía ha pisado el freno para no anegar todo Madrid de narcopisos. Hay un público muy heterogeneo, como a mi me gusta. Muchos coches entrando y saliendo, bastantes currelas y gente normal, gritos de machacas dando el agua, sonidos de ambulancias, yonkis corriendo de acá para allá blandiendo sus pipas y haciendo sonar sus platas al viento, coches de policías con las sirenas a toda leche, grupos de chavales de 20 y pico en sus coches con la música a tope, muchas mujeres de entre 30 y 45....alegría, shishi, alegría. Me recuerda a los buenos tiempos a principios de los 2000, cuando no había casi policía y había grandes caravanas desde la A-3.
Entro en el chabolo al que voy los últimos meses, que es el chabolo al que la gente joven y guay, tiene grandes mesas y además puedes estar el tiempo que quieras... ,..... y menudo show me encuentro. A eso le llamo yo "cena con espectáculo". Lo primero, solo había tías y un hombre mayor. Pero atención, porque una de ellas tenía un tremendo bombo y se había escapado del hospital con la vía puesta porque iba a tener al bebé, y ahí estaba pipa en boca fumando como una descosida, mientras gritaba que estaba rompiendo aguas e insultaba a todos los que la intentaban ayudar. Imaginad nacer en el suelo de una chabola llena de papelas y útiles de consumo. Una chica llama a la ambulancia, y la ambulancia se niega a ir. Al final consiguen que venga una y se la llevan.
Este chabolo en concreto tiene su rollo, porque van yonkis de nueva generación que aún no son auténticos yonkis 100%, lo cual es muy importante, pues asegura la continuidad de estos guettos de depravación. Son en buena parte gente que aún no se ha enganchado como Dios manda. pero que ya consumen casi a diario y progresan muy adecuadamente para acabar en zonas del poblado mucho mas oscuras y siniestras, y que, por supuesto, están destinadas en exclusiva a los yonkis de alto rango. Algo que me llama la atención de los jóvenes, es que todos fuman en pipa, porque no conocen el noble arte de la plata. De vez en cuando alguno me mira y se sorprende, y si me preguntan, les enseño como se hace, pues es un método mucho mas sano y menos adictivo.
Al final, ya de noche, hago la buena acción del día en busca de unos puntos extra de karma. Cuando pongo rumbo a casa, acabo ayudando a un parroquiano impedido en silla de ruedas, y le voy empujando mas o menos 700 metros hasta su parada de bus. El me va contando su vida. Resulta que vivía en la calle, le operaron, y de no cuidarse la operación, tuvo una infección muy grave y se quedó en silla de ruedas. Y el pobre hombre ahí vive. Por el día se pone a pedir en Conde de Casal, y cuando cae la noche, se va como puede a disfrutar de sus ingresos. A poco que hablas con la gente en estos sitios, te das cuenta que son vidas llenas de desgracia y miseria desde el mismo nacimiento, aderezado con la mala suerte y ruina extra que te aportan las visitas a este tipo de lugares.
Al final cojo 2 micritas mas y me vuelvo a casa con paso renovado. Gasto 40 euros en total, y me duran desde las 19:00 del Miércoles, hasta las 13:00 del Jueves. Not bad. Además, me doy cuenta que el dolor de mi corazón ya ha desaparecido por completo, incluso después de finalizar casi completamente los efectos de las drojas. Podria parecer que es caro, pero en realidad , es barato.
Hace buena tarde, y me he saltado todos los protocolos, ya llevo 5 cervezas, y aunque no acostumbro a beber ni tomar nada entre semana por disciplina y por respeto a mis quehaceres, hoy es un día especial. Es San Valentín, y mi amada resulta que me dice que está conociendo a otro hombre y me mete en la friendzone de golpe, así que decido que su regalo va a ser devuelto y va a ser invertido en mejores menesteres. Al poco, me dice que su "chico" la ha dejado justo hoy, vaya, que casualidad. Sin embargo, decido que no voy a hacer el canelo ni voy a caer en sus juegos. Ni un paso atrás.
Primero voy a devolver el regalo, recibo el cash, y pongo rumbo al infierno de buena tarde-noche, que es cuando mejor entra el material. Cae el sol, y un suave y agradable viento se mezcla con el polvo en suspensión que levantan las kundas al pasar. El poblado estaba animado, con mucha vida y energía, algo que hace muchos años que no veía, lo cual me aporta una chispa de esperanza. Hay cada vez mas y mas puntos de venta, se nota que la policía ha pisado el freno para no anegar todo Madrid de narcopisos. Hay un público muy heterogeneo, como a mi me gusta. Muchos coches entrando y saliendo, bastantes currelas y gente normal, gritos de machacas dando el agua, sonidos de ambulancias, yonkis corriendo de acá para allá blandiendo sus pipas y haciendo sonar sus platas al viento, coches de policías con las sirenas a toda leche, grupos de chavales de 20 y pico en sus coches con la música a tope, muchas mujeres de entre 30 y 45....alegría, shishi, alegría. Me recuerda a los buenos tiempos a principios de los 2000, cuando no había casi policía y había grandes caravanas desde la A-3.
Entro en el chabolo al que voy los últimos meses, que es el chabolo al que la gente joven y guay, tiene grandes mesas y además puedes estar el tiempo que quieras... ,..... y menudo show me encuentro. A eso le llamo yo "cena con espectáculo". Lo primero, solo había tías y un hombre mayor. Pero atención, porque una de ellas tenía un tremendo bombo y se había escapado del hospital con la vía puesta porque iba a tener al bebé, y ahí estaba pipa en boca fumando como una descosida, mientras gritaba que estaba rompiendo aguas e insultaba a todos los que la intentaban ayudar. Imaginad nacer en el suelo de una chabola llena de papelas y útiles de consumo. Una chica llama a la ambulancia, y la ambulancia se niega a ir. Al final consiguen que venga una y se la llevan.
Este chabolo en concreto tiene su rollo, porque van yonkis de nueva generación que aún no son auténticos yonkis 100%, lo cual es muy importante, pues asegura la continuidad de estos guettos de depravación. Son en buena parte gente que aún no se ha enganchado como Dios manda. pero que ya consumen casi a diario y progresan muy adecuadamente para acabar en zonas del poblado mucho mas oscuras y siniestras, y que, por supuesto, están destinadas en exclusiva a los yonkis de alto rango. Algo que me llama la atención de los jóvenes, es que todos fuman en pipa, porque no conocen el noble arte de la plata. De vez en cuando alguno me mira y se sorprende, y si me preguntan, les enseño como se hace, pues es un método mucho mas sano y menos adictivo.
Al final, ya de noche, hago la buena acción del día en busca de unos puntos extra de karma. Cuando pongo rumbo a casa, acabo ayudando a un parroquiano impedido en silla de ruedas, y le voy empujando mas o menos 700 metros hasta su parada de bus. El me va contando su vida. Resulta que vivía en la calle, le operaron, y de no cuidarse la operación, tuvo una infección muy grave y se quedó en silla de ruedas. Y el pobre hombre ahí vive. Por el día se pone a pedir en Conde de Casal, y cuando cae la noche, se va como puede a disfrutar de sus ingresos. A poco que hablas con la gente en estos sitios, te das cuenta que son vidas llenas de desgracia y miseria desde el mismo nacimiento, aderezado con la mala suerte y ruina extra que te aportan las visitas a este tipo de lugares.
Al final cojo 2 micritas mas y me vuelvo a casa con paso renovado. Gasto 40 euros en total, y me duran desde las 19:00 del Miércoles, hasta las 13:00 del Jueves. Not bad. Además, me doy cuenta que el dolor de mi corazón ya ha desaparecido por completo, incluso después de finalizar casi completamente los efectos de las drojas. Podria parecer que es caro, pero en realidad , es barato.
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