O sea, el tío vive en Miami y dice haberse forrao entrenando a la gente de allí.
Pues eso es una mentira gigante y palmaria: el fantasmón para empezar nisiquiera sabe cómo es la sociedad de allí.
Básicamente porque apenas empiezas a facturar en ese sitio, ya tienes el Insta petado de fotos, reels y stories con toda la de fiestas, actos sociales, saraos, tinglados y eventos a los que te invita la gente de por allí. Sobre todo si eres un trainer de ricos o de gente bonita. Sobre todo si vendes imagen, estilo de vida o valores.
Ya no porque el éxito llame al éxito, sino por el networking que hay por la zona, donde a menudo se tiende a contratar por defecto y en primera instancia a los profesionales que pasea a la gente por sus redes. Aquello va todo a base de recomendaciones así, haced la prueba y mirad cualquier social media de cualquier profesional reputado que se anuncie o mueva por allí, veréis que enseguida sus redes son un muestrario de clientes, da igual si son famosetes de medio pelo, ricos anónimos o simplemente los vecinos de algún barrio en concreto. También da igual si eres un antisocial o si vas de underground: como mucho conseguirás que sólo te etiqueten o sólo te paseen por los stories en vez de por los feeds, pero el caso es que o estás en algún círculo y bien expuesto... o no existes. Es imposible facturar como para sacarse un sueldecito sin acabar saliendo hasta en la fruta sopa. Ya no te digo el cacao que armas cuando se supone que te lo estás llevando crudo.
Y la cosa no termina ahí, resulta que si eres latino o aspañolo hay una serie de vainas y de normas y de filtros racializados que no vas a poder eludir ni de flai: el único que termina aguantando que su mujer esté en onlyfans es el que limpia las piscinas o el que barre los suelos. Y eso será si sus jefes no se lo impiden. De hecho, es que no está bien visto ni tan solo que la tía pose en un bikini minúsculo con el perfil abierto. Eso es de perra arrabalera.
Y luego resulta que hay clubes, garitos, restaurantes y playas y piscinas donde te tienes que hacer fotos periódicamente para que todo el mundo sepa dónde puede preguntar por ti y dónde no. Y el pavo este no arroja ni una referencia obligada.
Os lo dice uno que sí ha vivido por allí.
Y para rematar, esos coches y esas casas y hasta la ropa que enseña son muchísimo más rastreables y todos de alquiler o de palo.
No digo que no haya conseguido clavársela a alguien, digo que se la intenta clavar a tolputomundo y no va a colar.