A muchos norteamericanos con apellidos británicos e irlandeses les encanta ir de irlandeses pata negra, porque eso de ser descendientes de un pueblo que sufrió penurias a manos del opresor británico (los enemigos de los norteamericanos en su lucha por la independencia) y que emigró a los Estados Unidos y prospero, a los norteamericanos se la pone dura. Casi nunca verás a un norteamericano alardear de ser descendiente de ingleses; ahora que ser descendiente de irlandeses es otra cosa. Es como lo de Joe Biden, que es descendiente de irlandeses e ingleses (entre otros) pero siempre que lo ves mencionar a sus antepasados dice "I'm Irish".