Tico, ¿en serio no te has leído "Los Invisibles"? Hace más de 10 años que Grant Morrison escribió sobre estas cosas.
Oppenheimer dijo...
"Me he convertido en la Muerte. El Destructor de Mundos."
Y ese encantamiento, ese conjuro, en ese momento, abrió la puerta a nuestro mundo. Oppenheimer, sacerdote secreto de Azatoth, el dios petulante del caos nuclear, llevó a cabo su trabajo como estaba planeado.
Y cuando la bomba explotó, se produjo una brecha, y algo imposible entró en el universo, descargándose en nuestra realidad el 2 de julio de 1947 en Roswell, Nuevo Méjico.
Las ondas de choque de su entrada en el espacio 3-D reverberaron hacia atrás, hacia delante, y lateralmente por el espacio-tiempo. Ése es el auténtico significado de la caída bíblica. Intenta entender este imposible "ello" como un ángel, un dios, caído en el mundo que había creado.
Un artista atrapado en su propia obra maestra, se convirtió en propiedad de los científicos personas de color, la ciencia negra.
La cosa que se estrelló en nuestra realidad en Roswell en 1947 es el creador de nuestro universo. Su vivisección comenzó casi de inmediato. Escalpelos abrieron los sellos y todo fue mal simultáneamente en todas partes.
Este secreto está tras todas las guerras y holocaustos, los asesinatos, la esclavitud, el poder de los gobernantes, y del gobierno sobre la gente.
Y los primeros nacidos del secreto son sus celosos protectores, los ARcontes, reyes perdidos de la Tierra.
¿Puedes sentirlos ahí, en el margen de tus malos sueños?
A los pies de esos falsos poderes nuestros gobernantes rezan y hacen sacrificios, sin darse cuenta de lo que han despertado.
En las células eternas y llenas de luz del universo inverso, los ejércitos de la Iglesia Exterior se reúnen por millone. Armaduras de camuflaje buscando e imitando continuamente pesadillas humanas, esperando la orden de venir y comenzar por fin...
La invasión. El armagedón.
Escuchad esto:
Cuando el trabajo de nuestros amos haya terminado, todas las cosas vivas tendrán el estatus de una máquina.
No habrá creatividad, sólo productividad.
En lugar de amor habrá miedo y desconfianza, en lugar de rendición habrá sumisión.
Reemplazaremos el contacto con el aislamiento, y la alegría con pena. La esperanza dejará de existir como concepto.
Cubriremos la Tierra de acero y cemento. Este planeta será una granja industrial que producirá fulastres para dar energía y mantener los motores de las factorías y alimentar a nuestros amos.
Un policía eléctrico en cada cabeza.
Vuestros hijos nacerán encadenados, vivirán sólo para servir y morirán angustiados y en la ignorancia.
Mirad a vuestro alrededor. El proceso ya está en su etapa final. Y vosotros, como todos los demás, ocuparéis vuestro lugar en la línea de producción. Quizás os permitamos ser capataces de campos de trabajo. Es genial lo que saborear un poco de poder y un uniforme brillante puede hacer incluso al mayor amante de la libertad...