gorgias1976
Madmaxista
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Ánimo vecinos, si en Bilbao lo estamos consiguiendo Donosti no tardará en caer.
Aunque suene a hijoputada, me figuro que lo va a pasar en MCC va abrir los ojos a muchos.En donosti no se vende nada, pero la gente sigue emperrada en no bajar.
La mediana de precios da vértigo.
Aunque suene a hijoputada, me figuro que lo va a pasar en MCC va abrir los ojos a muchos.
No hay mejor apisonadora para allanar la cuesta de enero que los 180 millones de euros del rellenito de Navidad. El 'pastizal' que la lotería dejó en Mondragón el 22 de diciembre comienza poco a poco a aflorar. Pero lo hace con cuentagotas y muy lejos de la prodigalidad que algunos vaticinaban. «El miedo guarda la viña», sentenciaba Mari Carmen desde la barra del bar Avenida de San Andrés.
Después de un otoño tan aciago en lo laboral y en lo económico, los mondragoneses agraciados con el rellenito guardan su dinero a buen recaudo mientras afilan el lápiz para hallar la mejor rentabilidad con el mínimo riesgo para su recién adquirido patrimonio. En medio de la general cautela, sólo los más decididos se han lanzado a comprar pisos. Datos facilitados por las agencias inmobiliarias consultadas permiten estimar en una treintena el número de viviendas cuya compraventa se han materializado en la localidad y alrededores desde que cayó la lotería. Un volumen «no muy alto teniendo en cuenta el dineral que llovió sobre la localidad», valoraba el experto Jesús Markaide.
El sector financiero también se frota las manos con la avalancha de ciudadanos súbitamente enriquecidos. Asier Pérez, director de Caja Rural, calculaba en «unas dos mil» las personas que han resultado agraciadas en mayor o menor medida con el rellenito. Este cómputo abarcaría «desde poseedores de participaciones y décimos compartidos hasta los afortunados que tienen uno o más décimos». La décima parte de la población de Mondragón se ha repartido 450 décimos por importe de 144 millones de euros líquidos, una media de 72.000 euros netos por agraciado.
Hacer la 'rueda bancaria'
Los directores y gestores de las distintas entidades bancarias trabajan a destajo atendiendo a tan larga nómina de nuevos ricos. Asier Pérez se reconocía «desbordado: tenemos más trabajo que nunca». Las reuniones con los afortunados se suceden de forma interminable durante jornadas que muchos días se prolongan «hasta las 8 de la tarde», aseguraba el director de Caja Rural.
Los agraciados recorren estos días las entidades financieras en una frenética 'rueda bancaria' buscando la propuesta más ventajosa para su dinero. Pero lo normal, según el director de la sucursal de Caja Rural, «es que los clientes opten por repartir sus depósitos entre dos o tres entidades».
Habrá que esperar a que la 'rueda bancaria' pare de girar para que los millones de lotería comiencen a aflorar de verdad en la economía real. Jagoba Gamarra, director de la sucursal del BBVA, confiaba en que eso se «producirá de aquí a verano». Por ahora, los millonarios de la lotería están más ocupados en colocar su dinero que en gastarlo. Y según Gamarra, el 95% de ellos lo hace eligiendo el producto financiero más conservador: la imposición a plazo fijo. La gente «no quiere riesgos y desconfía de los productos financieros complejos», reconocía.
Quienes prefieren invertir en ladrillo se han decantado mayoritariamente por la urbanización de Gelma, la más apetecible por su ubicación céntrica y por su calidad constructiva. Al promotor inmobiliario Zigor Aginagalde también le ha caído la lotería, con la venta 15 viviendas en lo que va de enero. La demanda es tal que ha desatado todo tipo de rumores sobre incrementos de precios, el agotamiento del 'stock'... «Aún nos quedan viviendas y los precios se mantendrán inalterados hasta el 28 de febrero», tranquilizaba Aginagalde. A partir de esa fecha, admite, la coyuntura general y las circunstancias locales «apuntan hacia un alza de precios en nuestro caso».
Rosa Redal, desde la Inmobiliaria Anboto, duda de que se produzca esa subida. «Cuando lo de la lotería se acabe, el contexto de crisis industrial y desempleo permanecerá ahí», razonaba.
Pero, en general, la alegría de la lotería brota con exasperante lentitud y en medio de la mayor discreción. En San Andrés, epicentro del 'rellenito' de Navidad, no faltan comentarios sobre «los coches nuevos que se ven» por el barrio. Incluso se ha extendido la especie de que un agraciado «se ha comprado un Maserati».
Ni una botella de cava
Automóviles nuevos «sí que se observan, algún Opel Insignia, BMV... pero lo del Maserati no me lo creo», atestiguaba Luis, del bar Lizarra, que no ha visto ni rastro de la lluvia de millones en su establecimiento. «Aún guardo en almacén las botellas de cava que traje el día que cayó el rellenito; no se consumió ni una; las tendré que destinar al pintxo-pote», lamentaba.
En el cercano Rincón del Ibérico, Jacinto aseguraba «sólo una persona vino a darse el capricho de comprar un jamón de bellota porque le había tocado la lotería». El resto de las ventas han sido «las usuales durante una campaña navideña». Tampoco Tobías, desde su tienda de ropa de la calle Dr. Báñez, detectaba «ningún incremento en las ventas por lo de la lotería». Los bares venden «los mismos cafés de antes», y como apuntaba Luis del Lizarra, los agraciados guardan su dinero y preservan su anonimato hasta el extremo de que «muchos encajan muy mal que les felicites en público por el premio obtenido».
Situaciones familiares apuradas, amortización de créditos pendientes y otras circunstancias están ralentizando el flujo de dinero al consumo. Pero algunos tímidos atisbos comienzan apreciarse en el sector automovilístico. Lejos de las ventas astronómicas que la rumorología les atribuye, los concesionarios consultados (Audi, Ford, Citroen, Renault, Mercedes y BMV) cuentan con los dedos de una mano las unidades vendidas hasta la fecha y vinculadas directamente a la lotería. Son más de los que cabría esperar en un mes tan desolador como tradicionalmente es enero, pero las expectativas suscitada por el 'rellenito' no se han cumplido. Al menos de momento.
Tomás Muñoz, jefe de ventas de Udalaitz (Seat, Audi, VW) aseguraba que «de aluvión de clientes, nada; lo que ha habido es un ligero goteo». Las cosas «no están para derroches y todo el mundo tapa u oculta su dinero; nadie habla claro de lo que le ha tocado». Hay un afán patente por «evitar dar el cante». Pero no es menos cierto que «comienzan a aparecer por el concesionario nuevos potenciales compradores que ambicionan coches de alta gama. Las expectativas son buenas».
A Costa Rica con los abuelos
Tras un buen coche, el siguiente objeto de deseo es el capricho de un viaje. No faltan casos como el del poseedor de dos décimos (640.000 euros netos) que proyecta darse el lujo de viajar en el Transiberiano, o del soltero sin deudas que se ha tomado un año de excedencia para recorrer el mundo.
Marijo Alutiz, de Eroski Bidaiak, confirmaba que se han producido contrataciones de viajes que «se delatan» por corresponder a agraciados en la lotería. Viajes a Nueva York para siete personas, o a India o a Costa Rica «con hijos y abuelos y al margen de las vacaciones de verano» son los casos que han detectado en esta agencia. «Por ahora no son muchos, apenas media docena, pero es obvio que son caprichos derivados de la lotería, aunque los contratantes se guardan mucho de confesarlo».
Amanda, desde la oficina de Viajes Arrasate, aseguraba que «no me da el día» para atender a la avalancha de llamadas y consultas que está recibiendo estos días, «cuando hasta febrero normalmente el trabajo es muy tranquilo». También ella ha observado los efectos de la lotería, e incluso algún caso de generosidad como el de una agraciada que ha invitado a tres amigas a disfrutar de una semana a gastos pagados en Tenerife». Pero, pese al inusual ajetreo, reconocía que la gente «no está para echar la casa por la ventana en viajes. Primero hay hipotecas que pagar, ayudar en casa, comprar un coche y, si sobra, permitirse el lujo de un viaje».
Jagoba Gamarra, desde su despacho de director de la oficina del BBVA, recalcaba que no hay que perder la perspectiva. Un décimo del rellenito «no te soluciona la vida». Es, desde luego, un estupendo «colchón para el futuro», que algunos aprovechan para firmar una prejubilación antes poco tentadora, ayudar a emanciparse a unos hijos que no pueden acceder al mercado inmobiliario o, en el caso de los más emprendedores, invertir en un nuevo negocios o actividad económica.
:XX::XX::XX::XX::XX::XX::XX::XX:Que Guecho es menos conocido es innegable. Que es el verdadero último bastión del nuncabajismo, también.
A día de hoy 49 pisos de menos de 180K: Un 2,78% del total (4 veces menos que en San Sebastián).
Por cierto, 3 pisos menos que el mes pasado.
En la capi y alrededores sí, va lennnto. En el resto de la provincia no tanto, se nota que muchos pepitos están heredando pisos del cuéntame y no saben qué hacer con ellos...lo vuestro, giputxis, es digno de estudio aparte ::
ánimo con el hilo, de momento evoluciona lentamente :XX: