Es una metáfora, pero si te pones así, y ya que hablas de impuestos, pues que sea con tus impuestos y no con los míos.
Es que esto no es el lejano Oeste sino un país democrático del Primer Mundo, y las cosas no funcionan diciendo: "todo lo que no nos gusta que lo financien los demás", porque en España aparte tuyo hay 50 millones de personas más y los impuestos no van a la carta ni al gusto de cada uno, sino que lo decide el gobierno que ha sido elegido en las urnas.
- Unos no estarán de acuerdo en pagar con sus impuestos el sueldo de Pablo Iglesias y los diputados de Podemos.
- Otros no estarán de acuerdo en pagar con sus impuestos el sueldo de Abascal y los diputados de VOX.
- Otros no estarán de acuerdo en pagar con sus impuestos el sueldo de Casado y los diputados del PP.
- Otros no estarán de acuerdo en pagar con sus impuestos el sueldo de Sánchez y los diputados del PSOE.
- Otros no estarán de acuerdo en pagar con sus impuestos el sueldo de los funcionarios.
- Otros no estarán de acuerdo en pagar con sus impuestos el sueldo de los altos cargos de la administración.
- Otros no estarán de acuerdo en pagar con sus impuestos a los sindicatos.
- Otros no estarán de acuerdo en pagar con sus impuestos a la patronal.
- Otros no estarán de acuerdo en pagar con sus impuestos a la monarquía y la Familia Real.
- Otros no estarán de acuerdo en pagar con sus impuestos las leyes de violencia de género.
- Otros no estarán de acuerdo en pagar con sus impuestos la tauromaquia y las subvenciones a las corridas de toros.
Y así podemos ver cientos de cosas más sufragadas por todos los españoles, algunas que a ti te gusten pagar y otras que no, al igual que el resto de españoles.
Pero esto no va a la carta, aquí se paga todo, lo que nos guste y lo que no.