Como canario no saben la rabia e impotencia que da ver como están convirtiendo las islas en unos enjambres sin ley.
La de millones gastados en promoción y excelencia turística para que ahora se carguen el trabajo de años en unos pocos meses.
Temo por lo que pueda venir. Aquí no viven 6.000 como en Lampedusa, aquí son 2 millones de canarios y el 40% del empleo depende de la industria turística.
El desgobierno socialpodemita y sus traidores en el gob.autonómico canario pagarán por todo esto.