G
Gurriato
Guest
No es que nadie me haya pedido su opinión, pero quiero declarar que soy
enemigo acérrimo de todo tipo de boicots.
El boicot es un instumento del repruebo y yo soy partidario de hacer las cosas
con amor, mucho amor.
La conducta idónea es que el pueblo, colectivamente, sea solidario y
plural con su país, España, y con todas las naciones, nacionalidades,
pedanías y anteiglesias que la forman porque ya está bien que ciertas
naciones continúen disfrutando, en detrimento de las otras, de unos
privilegios y beneficios concedidos desde que vivía Bahamondillo el
Ferrolano.
Pero eso no es un boicot. Simplemente lo que ocurre es que los españoles
estamos ahora fomentando y ayudando, pluralmente, al crecimiento y
desarrollo intrínseco de otras realidades nacionales menos favorecidas,
para con las que no hay pluralité ni Dios que la fundó, y que también tienen
derecho a crecer y desarrollarse económica y socialmente, porque todos somos
criaturitas del Señor y, o amamos todos, o la fruta al río.
Estamos haciendo caso a nuestros vecinos catalanes, con los que tantos
lazos de hermandad nos unen, quienes siempre han dicho que es menester
consumir productos de cercanía, cosas de los territorios aledaños, de la
vuelta' la esquina.
Bien es verdad que Cataluña está en una esquina, allá en el fondo a la
derecha como ocurre con los lavabos, pero a la mayoría de la gente le pilla
más a mano otras realidades nacionales más cercanas. Basta ya de que toda la
industria se concentre en un solo punto de de la realidad multinacional
porque eso es malísimo para los nativos de esos pagos, debido a la tremenda
polución que engendra tanta industria y los impuestos tan altos que ha de
pagar con tanto negocio
¿Por qué no les damos un descansito?
¿De acuerdo?
¡Manos a la obra!
¿Pero cómo saber si los productos que vamos a adquirir provienen de esas
naciones con las que queremos ser solidarios?
Pos mu fásil. Se crea solidaridad en función de la identificación del origen
de los productos mdiante MEDIANTE EL Nº DE REGISTRO SANITARIO O "NRGS".
Detrás del numerito viene la provincia de procedencia, igual que las
antiguas matriculas; así pues sería, por ejemplo, NGRS 23453/B, B
(Barcelona), GE(Gerona), T (Tarragona) y L(Lérida); bueno, y los más
modelnos nos lo ponen más fácil y ponen otros signos, por ejemplo las
siglas CAT. No digo yo que sean esas provincias con las que has de ser
solidario necesariamente. Si eres andaluz puedes ser solidario con los
productos que provengan de Almería o Granada, y si eres extremeño puedes
solidarizarte con las provincias de Salamanca, Toledo y Huelva, pues siempre
conviene llevarse bien con los vecinos.
Recomiendo muy encarecidamente que las decisiones de solidaridad no se tomen
de manera aislada y arbitraria sino que se discuta la lista de los
productos con otros miembrso de tu nación, pedanía o anteiglesia, y sólo
después de haberlo dialogado y libremente, decidir si hay que comprar de
ese sitio solamente o si plurificar la pasta comprando productos de otras
realidades nacionales que forman también parte de la Piel de Toro.
Mucho diálogo, mucho amor, mucha solidaridad y mucha pluralidad es lo que
hace falta, lo demás es de franquistas.
LE MARQUIS DE LA PATTE NOIRE
LIBERTÉ, EGALITÉ, PLURALITÉ
enemigo acérrimo de todo tipo de boicots.
El boicot es un instumento del repruebo y yo soy partidario de hacer las cosas
con amor, mucho amor.
La conducta idónea es que el pueblo, colectivamente, sea solidario y
plural con su país, España, y con todas las naciones, nacionalidades,
pedanías y anteiglesias que la forman porque ya está bien que ciertas
naciones continúen disfrutando, en detrimento de las otras, de unos
privilegios y beneficios concedidos desde que vivía Bahamondillo el
Ferrolano.
Pero eso no es un boicot. Simplemente lo que ocurre es que los españoles
estamos ahora fomentando y ayudando, pluralmente, al crecimiento y
desarrollo intrínseco de otras realidades nacionales menos favorecidas,
para con las que no hay pluralité ni Dios que la fundó, y que también tienen
derecho a crecer y desarrollarse económica y socialmente, porque todos somos
criaturitas del Señor y, o amamos todos, o la fruta al río.
Estamos haciendo caso a nuestros vecinos catalanes, con los que tantos
lazos de hermandad nos unen, quienes siempre han dicho que es menester
consumir productos de cercanía, cosas de los territorios aledaños, de la
vuelta' la esquina.
Bien es verdad que Cataluña está en una esquina, allá en el fondo a la
derecha como ocurre con los lavabos, pero a la mayoría de la gente le pilla
más a mano otras realidades nacionales más cercanas. Basta ya de que toda la
industria se concentre en un solo punto de de la realidad multinacional
porque eso es malísimo para los nativos de esos pagos, debido a la tremenda
polución que engendra tanta industria y los impuestos tan altos que ha de
pagar con tanto negocio
¿Por qué no les damos un descansito?
¿De acuerdo?
¡Manos a la obra!
¿Pero cómo saber si los productos que vamos a adquirir provienen de esas
naciones con las que queremos ser solidarios?
Pos mu fásil. Se crea solidaridad en función de la identificación del origen
de los productos mdiante MEDIANTE EL Nº DE REGISTRO SANITARIO O "NRGS".
Detrás del numerito viene la provincia de procedencia, igual que las
antiguas matriculas; así pues sería, por ejemplo, NGRS 23453/B, B
(Barcelona), GE(Gerona), T (Tarragona) y L(Lérida); bueno, y los más
modelnos nos lo ponen más fácil y ponen otros signos, por ejemplo las
siglas CAT. No digo yo que sean esas provincias con las que has de ser
solidario necesariamente. Si eres andaluz puedes ser solidario con los
productos que provengan de Almería o Granada, y si eres extremeño puedes
solidarizarte con las provincias de Salamanca, Toledo y Huelva, pues siempre
conviene llevarse bien con los vecinos.
Recomiendo muy encarecidamente que las decisiones de solidaridad no se tomen
de manera aislada y arbitraria sino que se discuta la lista de los
productos con otros miembrso de tu nación, pedanía o anteiglesia, y sólo
después de haberlo dialogado y libremente, decidir si hay que comprar de
ese sitio solamente o si plurificar la pasta comprando productos de otras
realidades nacionales que forman también parte de la Piel de Toro.
Mucho diálogo, mucho amor, mucha solidaridad y mucha pluralidad es lo que
hace falta, lo demás es de franquistas.
LE MARQUIS DE LA PATTE NOIRE
LIBERTÉ, EGALITÉ, PLURALITÉ