Tal cual os lo cuento lo han visto estos ojos y escuchado estos oídos. Bus urbano de capital de provincia vasca. Iba una niñata (le hecho 18 años como mucho) voceando bien alto y contándoles a sus amigas sus últimas correrías. Y lo gritaba a los 4 vientos, que tiene ya el shishi en carne viva, porque lleva una semana que no ha parado de amar.
Lo del mejor amigo del novio lo ha contado a carcajada limpia, vamos que le importan una cosa sus sentimientos cuando se entere que se ha tirado a su mejor amigo.
Todo el bus en silencio y flipando con semejante impresentable. Iba enseñando toda la cacha que podía pero más antiestética que un pie (flequillo cortado a lo hacha). Estarán sus padres contentos con ella.
Así está el patio señores...
