pacomer
Será en Octubre
- Desde
- 15 Ene 2007
- Mensajes
- 28.044
- Reputación
- 85.438
NO AL DUMPING LABORAL ESPANOL: protestan los chinos nepalies antes de la tradicional celebración deportiva.
Leido en Expansión
Vamos que tecnicamente son pobres, pobres con salarios de hambre. Asi pueden lucer el palmito el Zapatero y el Caldera de que se bate record de empleo, cuando ese empleo sería considerado ilegal en la mayoria de los paises civilizados. Este es el destino que nuestros politicos y filantropos empresarios nos tienen reservado, competir contra los paises del tercermundo en salarios. Venga, a trabajar mas que los chinos y por un platico de arroz.
Los sueldos no siguen el compás de los precios. El SMI ha subido un 294% desde su creación, pero el IPC lo ha hecho un 438%. Al tiempo, la retribución media está creciendo a un ritmo tres veces superior a la inflación.
En el mercado de trabajo actual, el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) ha cobrado una importancia desconocida: impulsado por el boom de pagapensiones, más de la mitad de los nuevos asalariados durante el pasado ejercicio tienen un sueldo inferior al salario mínimo, es decir, que cobran menos de 540 euros brutos mensuales. Estos trabajadores se suman a los más de tres millones de personas que reciben el SMI en España y que han sido los más perjudicados por la subida de la inflación.
En concreto, desde 1980 –año en el que se creó el SMI actual después de que España ratificara el convenio internacional que lo regula–, el poder de compra de los empleados que cobran el salario mínimo acumula una caída del 12,7% por culpa de la inflación. Así, mientras que en este periodo el IPC ha escalado un 438%, el SMI lo ha hecho sólo un 294,6%.
La pérdida de la capacidad adquisitiva, en una perspectiva histórica, no ha distinguido entre los gobiernos del PSOE y del PP, si bien es cierto que en los últimos años el escenario ha mejorado. Así, desde 2004, España encadena tres ejercicios consecutivos en los que el poder de compra aumenta, en tasas del 5,7% (2004), 1,1% (2005) y 2,9% (2006). Aunque esto no ha impedido que en el acumulado se registre una pérdida del 12,7%.
Es más, el Ejecutivo de Zapatero, que ha hecho de la subida del SMI una de sus banderas, se ha comprometido a acercar este salario a cerca de 600 euros a final de esta legislatura –en 2008–. Y aunque el esfuerzo económico para realizar el incremento es importante, no solucionará mucho al bolsillo de los trabajadores: el SMI se incrementará cerca de un 11% en dos años, con lo que no recuperarán siquiera el poder adquisitivo perdido. Y habrá que sumar al deterioro las subidas del IPC hasta 2008. El problema se agrava si se tiene en cuenta que el SMI ha dejado de tomarse como referencia para actualizar las ayudas a la vivienda o las becas, que suben el compás del IPREM, indicador creado por el actual Gobierno, que sólo crece a un ritmo del 2% anual, acumulando también graves pérdidas de poder de compra.
Según los datos de la página web tusalario.es –que elaboran las organizaciones sindicales a partir de las estadísticas del INE y el Ministerio de Trabajo– ese proceso ha sido tan fuerte que los trabajadores con SMI en 2003 –último año que abarca el estudio– tenían un salario con una capacidad adquisitiva equivalente a la de 1975. De esta forma, en términos reales, el salario mínimo ha pasado de suponer casi el 38% de la retribución media en 1982 a representar sólo el 28%. Y eso pese a que el colectivo de perceptores del SMI, o sueldos inferiores –por tener jornadas reducidas– se ha incrementado.
El SMI es el máximo exponente de esta situación, pero los salarios medios siguen una evolución similar. En concreto, en el último año, el coste salarial ha crecido un 3%, mientras que la inflación lo ha hecho a un ritmo del 3,9%. O, lo que es lo mismo: el poder de compra se ha reducido casi un punto.
Los datos son aún más claros si se toma como punto de partida 2002, año de la entrada en vigor del euro. Los productos básicos han subido más de un 60% de media desde entonces; mientras, el incremento salarial acumulado en ese periodo apenas alcanza el 20%. Si se cruzan las variables, el resultado no deja lugar a dudas: el coste de la vida se ha incrementado a un ritmo tres veces superior al de los sueldos
Última edición: