Es la excusa de muchos padres para justificar su dejadez en la educación de sus hijos. Niños todo el dia "colocados" en manos de extraños (escuelas, extraescolares, empleados de hogar) mientras los padres estan ocupados trabajando o en multitud de necesidades creadas. Con el tiempo que les sobra (casi inexistente) intentan cumplir como padres de prisa y corriendo, atendiendo al niño entre watsapp's. Los fines de semana saturados de todo tipo de actividades "en familia" que solo permiten ir en grupo, pero realmente estan tan ocupados, que no comparten mas que la posición geográfica. En medio de toda esta vorágine de modernidad, si el niño hace de niño, juega, se despista, vive en su mundo feliz de niño... resulta que está enfermo, porqué no cumple el plan trazado por sus progenitores.
Niños de pocos años, entrenando como adultos. Entrenadores de niños de 6 - 8 años advirtiendo a los padres que el equipo "juega para ganar". Evidentemente si el niño no es un" borreguito" y rompe la disciplina "TIENE UN PROBLEMA", para los padres es mas cómodo aceptarlo que pensar que su hijo es un niño, con una mente en formación y que no deberia tener una vida de un adulto atrapado en la carrera de la rata. Que tienen que dedicarle el tiempo necesario, a cada niño el suyo, tiempo de calidad, que tienen que enseñar con el ejemplo. Que el niño "interpreta como niño" las actitudes y situaciones de los padres y familiares, por eso tienen que ser claras y concisas, para que las interpreten bién. Que tienen la obligación, porque así la asumieron al decidir tenerlo, de permitirle ser niño y guiar su niñez como niño, no como un adulto.
Niños que por falta de atención o remordimientos de los padres, no les ponen límites o son muy difusos, y se convierten en tiranos.
Pero claro, si el niño no esta donde queremos que esté, es mas fàcil poner un nombre rimbombante al problema que aceptar que es un problema de educación, mala educación.