Ser funcionario es "fácil", apruebas la oposición, si la apruebas, y luego que te den plaza dónde quieres...
Pero a mi modo de ver tiene un hándicap enorme, y es la nula evolución de tu trabajo.
Después de 20 años sigues igual, cobrando algo más, pero igual.
En cambio, en el sistema privado, si vales, y aportas a la empresa, comienzas ganando poco y teniendo menos responsabilidad hasta ganar mucho más y ser, incluso, socio de una empresa.
Dos caminos:
1- Papá estado siempre estará ahí velando por tí, dándote un sueldo que pareciese de rico, pero es de pobres.
2- Tú, tu esfuerzo, tus conocimientos, tus habilidades y las ganas de comerte el mundo. Si eres bueno en lo tuyo y puedes hacerlo por tu cuenta, podrías ganar en 1 mes lo que un funcionario en 3.
Yo lo veo como las piscinas.
Ésta la de adultos, llena de tiburones y no ves el fondo, con cantidad infinita de oportunidades.
Y la de niños, te llega a las rodillas, hay otros adultos que hacen de pastores de rebaño, pero tu evolución es ninguna.