La pregunta es:
¿Confiamos en nosotros mismos ergo en nuestra autoridad monetaria o preferimos emplear algo exógeno a nosotros mismos para concebir nuestro dinero?.
La pregunta no es fácil y llevamos dos mil años en un sistema con cierto equilibrio entre ambos hasta la era de la banca central.
Una vez que el dinero es nada, aparecen los teóricos de la emisión monetaria y también aparece ese comunismo/socialismo que pretende tomar control del banco central.
En resumen, las CBDC implican un modelo de sociedad concreto en el que se puede ejercer un control absoluto sobre la ciudadanía.