Lo que procede que votéis en vuestras urnas de la señorita Pepis es a la derecha, PP+VOX hasta ponerla en La Moncloa.
Pierdes el tiempo explicándole a un carnero cómo funciona el movimiento de los astros y la creación de estrellas.
El propio pueblo español aupará a la derecha al poder nada más el desastre económico empiece a ser palpable. Y lo sabes.
Hablo de hambre, pobreza y miseria extremas, que ya asoman por nuestras ciudades.
En esos momentos límite es cuando la Ultraderecha tiene una ventaja competitiva sobre la Ultraizquierda, y es que la derecha clásica siempre ofrecerá un culpable fácilmente indentificable al que embestir.
Los carneros bien dirigidos necesitan embestir contra algo. Algo tangible. Personas a quien puedan echar la culpa. Necesitan a los neցros, los etnianos, los judíos, los marroquís o los masones.
Eso es lo que realmente satisface al LUMPEN.
La ultraizquierda por contra es
impotente a la hora de sacrificar a un grupo social específico, y se pierde culpando "al sistema", "a las instituciones", "a la OTAN" y toda una serie de enemigos demasiado complejos para la plebe, indefinidos, inalcanzables, vaporosos, que no satisfacen las ansias de sangre de la masa amorfa democrática.
Elecciones YA.
Y veremos la campaña política más sucia de la historia de España.