No sé qué es peor, si las palabras de esta estulto o la reacción de los trogloditas furibundos.
Los niños no son del estado, ni deben serlo... pero cuánto me gusta la fruta hay que no tiene sino una visión mercantilista de la vida.
Ahora va a resultar que es una cuestión de de propiedad... pues mirad, si los niños PERTENECEN a los padres, yo no quiero pagar con mis impuestos en mantenimiento de las propiedades de otros.
Las personas no pertenecen a nadie que no sean ellas mismas. Los hijos son un bien precioso pero de ninguna manera son una propiedad, son algo a nuestro cuidado solamente...no moñacos a los que moldear a nuestro gusto.