Eso dicen lo que la han promovido, que es, como no, "por el bien" de los animalillos.
Los dueños de todos los perros tendrán que hacer un cursillo gratuito del que se desconoce el temario y quién lo impartirá.
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Pues claro, hoy en día todo es blanqueo e infiltración, y teoría de la herradura. Y al no poderse defender, los gatos disfrutan de una ventana de overtón más extensa; de cañonazos a castración.
Hace 20 años o así, siguiendo directrices de los anglos en la OTAN, y la propia miseria moral española y occidental, además de envidia de berenjena de amacamellos, que es de donde vienen los mininos, empezaron a permitir dar de comer a través de licencias, e infiltraron esos espacios de señoras viejecitas con el CES, pseudociencia obligatoria de la castración. Esto es su lógica consecuencia.