eL PERRO
Palazos en las Costillas
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Esta tarde me he ido a dar una vuelta por el campo. Al salir era totalmente de noche, y me he puesto un abrigo por primera vez en lo que va de otoño. Iba pensando en lo curioso que resulta el que hace solo unas semanas, a esa misma hora, aun metia la bola naranja con fuerza, y habia luz hasta las 11.... mientras que ahora antes de las 7 es noche cerrada
Por una parte me daba nostalgia veraniega, pero por otra, era un gustazo. En cuanto empieza el frio, desaparece la ralea de las calles. En este caso de los caminos. Nada de niños rata y etnianos estultoes que se adentran por los caminos para emborracharse, emporrarse y embicharse lejos de las miradas. Cuarentonas culonas de cosa embutidas como morcillas que van por ahi a andar en manadas de caracoleras chillonas, palurdos que van por ahi con el chucho pisando webos, etc.
Ahora estaba todo vacio, yo solo. Daba gusto volver a notar aire frio, despues de tantos meses de aire baboso subtropical. Esa agradable sensacion de notar frio y taparte con la chaqueta. Mientras andaba se veian rayos en el horizonte, una flipada la estampa.. esa sensacion de que viene, y estar por ahi a la intemperie. En eso ha empezado a chispear, y cuando me he querido dar cuenta estaba diluviando. Pero a reputo saco. Hacia mucho que no me calaba vivo asi
Que gustazo. Al principio dices jorobar, que me mojo. Pero una vez te has mojao, es un puñetero placer indescriptible. Vas pisando rios y charcos como si nada, levantas la cara hacia arriba y ves los chorrazos de agua caer sobre ti iluminados por los rayos, y el ruido del chaparron que te rodea. Me ha estado diluviando otra media hora hasta llegar, y me he metido a echarme un chorro de agua hirviendo por encima
QUE frutaDA no tener dinero ya para hacerme la TERMA ROMANA MAÑACA ya. Que br0tal seria venir todo chorreando de agua fria de la calle, despelotarte y meterte en tu terma con el agua a 40 grados y quedarte ahi una hora larga en el agua caliente, con tu carata cayendo por la cabeza, alumbrado todo un misero candil, emulando tiempos antiguos, y disfrutar de ese gustazo que es meterte en agua caliente cuando hace frio en la calle
Y entonces me ha venido la rabia de siempre, la de sentir que aqui no hay un puñetero invierno de verdad. Siempre recuerdo ese proceso de verano-otoño-invierno cuando vivia al norte de los alpes. Ese gustazo de que octubre fuera un mes de espesas nieblas, de choque termico, de salir a la calle y no ver un palmo delante de tus narices, como en las peliculas, de cambio brusco, de hojas amarillas por millones. Como noviembre ya era un mes frio de verdad, de cielos cubiertos, de dias larrrrgos de agua, con temperaturas que oscilaban estables en torno a los 5 grados todo el dia. Y como a finales de este mes empezaban las heladas, las primeras nevadas. Que gustazo jorobar, venias dando una vuelta por la calle a las 7, con la penumbra de las calles empedradas centroeuropeas y te caian copazos como puños sobre tu cabeza. Llegar a tu casa y que a la hora de la cena hubiera ya un enorme manto blanco. Y a otro dia que pareciera aquello el puñetero fargo, 10 bajo cero y un metro de nieve por todas partes. Diciembre de verdad, invierno de verdad
Me gusta mi tierra y me gusta el mediterraneo, ALIFORNIA, tiene potencial para robarle el rollo a la california de verdad. Pero no soporto el invierno de chichinabo. Ojaputola que se corte la fruta corriente del chorro esa y empiecen a haber por esta zona inviernos de verdad, con nieblazas, nevadazas y esa sensacion de estar en una larrrrga y fria noche, en la que desaparecen todos los niños rata botelloneros jovenlandésnegrada pilinguis y gaies
Por una parte me daba nostalgia veraniega, pero por otra, era un gustazo. En cuanto empieza el frio, desaparece la ralea de las calles. En este caso de los caminos. Nada de niños rata y etnianos estultoes que se adentran por los caminos para emborracharse, emporrarse y embicharse lejos de las miradas. Cuarentonas culonas de cosa embutidas como morcillas que van por ahi a andar en manadas de caracoleras chillonas, palurdos que van por ahi con el chucho pisando webos, etc.
Ahora estaba todo vacio, yo solo. Daba gusto volver a notar aire frio, despues de tantos meses de aire baboso subtropical. Esa agradable sensacion de notar frio y taparte con la chaqueta. Mientras andaba se veian rayos en el horizonte, una flipada la estampa.. esa sensacion de que viene, y estar por ahi a la intemperie. En eso ha empezado a chispear, y cuando me he querido dar cuenta estaba diluviando. Pero a reputo saco. Hacia mucho que no me calaba vivo asi
Que gustazo. Al principio dices jorobar, que me mojo. Pero una vez te has mojao, es un puñetero placer indescriptible. Vas pisando rios y charcos como si nada, levantas la cara hacia arriba y ves los chorrazos de agua caer sobre ti iluminados por los rayos, y el ruido del chaparron que te rodea. Me ha estado diluviando otra media hora hasta llegar, y me he metido a echarme un chorro de agua hirviendo por encima
QUE frutaDA no tener dinero ya para hacerme la TERMA ROMANA MAÑACA ya. Que br0tal seria venir todo chorreando de agua fria de la calle, despelotarte y meterte en tu terma con el agua a 40 grados y quedarte ahi una hora larga en el agua caliente, con tu carata cayendo por la cabeza, alumbrado todo un misero candil, emulando tiempos antiguos, y disfrutar de ese gustazo que es meterte en agua caliente cuando hace frio en la calle
Y entonces me ha venido la rabia de siempre, la de sentir que aqui no hay un puñetero invierno de verdad. Siempre recuerdo ese proceso de verano-otoño-invierno cuando vivia al norte de los alpes. Ese gustazo de que octubre fuera un mes de espesas nieblas, de choque termico, de salir a la calle y no ver un palmo delante de tus narices, como en las peliculas, de cambio brusco, de hojas amarillas por millones. Como noviembre ya era un mes frio de verdad, de cielos cubiertos, de dias larrrrgos de agua, con temperaturas que oscilaban estables en torno a los 5 grados todo el dia. Y como a finales de este mes empezaban las heladas, las primeras nevadas. Que gustazo jorobar, venias dando una vuelta por la calle a las 7, con la penumbra de las calles empedradas centroeuropeas y te caian copazos como puños sobre tu cabeza. Llegar a tu casa y que a la hora de la cena hubiera ya un enorme manto blanco. Y a otro dia que pareciera aquello el puñetero fargo, 10 bajo cero y un metro de nieve por todas partes. Diciembre de verdad, invierno de verdad
Me gusta mi tierra y me gusta el mediterraneo, ALIFORNIA, tiene potencial para robarle el rollo a la california de verdad. Pero no soporto el invierno de chichinabo. Ojaputola que se corte la fruta corriente del chorro esa y empiecen a haber por esta zona inviernos de verdad, con nieblazas, nevadazas y esa sensacion de estar en una larrrrga y fria noche, en la que desaparecen todos los niños rata botelloneros jovenlandésnegrada pilinguis y gaies
