Casi todos los países europeos tienen idiomas regionales propios, pero no se promocionan porque el interés del estado es mantener una unidad. El sistema político español es un despropósito que promueve la desunión en vez de la unión. Es un caso de ineptitud único entre todos los estados del mundo.
Francia: alsaciano, catalán, occitano, bretón, vasco, corso, provenzal, etc. Idioma oficial: francés.
Italia: toscano, siciliano, lombardo, napolitano, piamontés, ligurio, sardo, firulano, catalán, veneciano, etc. Idioma oficial: italiano.
Alemania: frisio, sorbiano, bajo alemán, etc. Idioma oficial: alto alemán.
Dar preferencia a un idioma regional sobre el común es autosabotearse como país. Lo de España es de badulaques.