Lo que llenó Puente de pintura fue todo Valladolid. Se ve que se pasó tantos años sin pintar nada en el ayuntamiento que en cuanto llegó a la alcaldía se puso a pintar toda la ciudad hasta el absurdo, algún afortunado (guiño guiño) se debió hinchar a facturar horas y material de pintura.
Carriles bici y calzadas a 30 con preferencia para bicis por doquier, líneas continuas de 30 cms. de ancho, calles céntricas con toda la calzada pintada de colorines que a los tres meses estaban otra vez todas sucias y negras...
Con mención especial para un carril bici universitario con una capa subida de peso de pintura y lleno de curvas absurdas que con lluvia o heladas resbalan que se matan. Apenas pasa nadie y está lleno de los derrapazos personas de color que le pega a la gente a traición.
En este calle junto a polígonos plantó en medio de cada carril un pasillo verde para bicis, no era raro ver a una charo tan sudamericana o a un jubilado ocioso a 10 por hora, con 20 coches de remeros detrás en primera echando pestes y emitiendo gases a lo loco.
El carril que eliminó en la Avda. de Gijón para hacerlo carril bici provocaba unas retenciones de coches arrancando y parando de la leche, más ruido y contaminación para los vecinos que antes.
Y más cosas que ya no me acuerdo, era surrealista, se pintaba como si no hubiera un mañana.