La candidata de Podemos por Palencia

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El pelo es de persona que trabaja mucho: demanda poca atención y permite trabajar con seguridad en un taller de maquinaria pesada.

La mirada es de persona inteligente y alerta, el clásico candidato del marqués de Galapagar.

El abdomen de persona que pasa hambre.

Ya no es solo eso. Es la actitud corporea. Está sentada derrumbada. No es solo la derroición fisica, es mucho más que derroición lo que expresa en su lenguaje no verbal.

A este tipo de seres los llamo "los tumbaos".
Todos conocemos a alguien asi, que está de pie y está tumbao.
Están sentados y está tumbaos. están caminando y caminan tumbaos. Se queda quietos, de pie y siguen tumbaos.

Es algo asi como el "descansen, AR!" que ordenaba el sargento en la mili, cuando estabas en formación y toda la formación se tumbaba de pie a su orden, sobre una cadera y sin mover el pie derecho, pues asi pero siempre van los tumbaos.
:D
 
Parece una pitonisa de esas que echaban las cartas en la tv.
 
Si el asesor de c imagen logra darle buena presencia lo prpongo para el Goya. Ojo que da mala imagen pero luego es una persona supercompetente y nos hace tragar crudos nuestros comentarios
 
Esta en vez de gritar "si se puede, si se puede" deberá entonar algo así; "no puedo, no puedo, ni conmigo mismo".
 
Ponedle un abrigo hortera de colorines y tenemos a Mother of Charos.
 
Se peina con franja en medio. Parece un heavy retirado de los 80s
 
Fieles a sus intereses los Podemitas...


Pederastas y ladrones en Podemos


Pederastas y ladrones en PodemosPederastas y ladrones en Podemos

La nueva política ha envejecido muy rápido. Tanto que en tiempo récord ha conseguido ser más vieja que aquella que atacaban en sus primeros meses de vida. Cuando Podemos tomó forma como partido político a principios de 2014 tras apropiarse de un movimiento lícito como el 15M, enarbolaron con fatua grandilocuencia que iban a “regenerar la instituciones”. Una vez en ellas, al margen de personajes tan cuestionables como Pablo Iglesias, Íñigo Errejón, Pablo Echenique o Ramón black Espinar, resulta que admiten en sus primarias a un condenado a 35 años por cinco robos y un depósito de armas de guerra. Pura excelencia paradigmática, vamos.


Cabecilla de la Federación Ibérica de Grupos Anarquistas (FIGA), el individuo en cuestión, de nombre Alejandro Mata Camacho, tiene como principal mérito curricular estar condenado por la mismísima Audiencia Nacional. Algo que no le impedirá ser el cabeza de lista en el Ayuntamiento madrileño de Collado Villalba. De esta manera, Mata Camacho entra por derecho propio en el panteón de los representantes más ignominiosos de Podemos.

Ahí está también uno de los personajes más execrables que ha tenido la formación: Pedro de Palacio, condenado en firme en 2003 por abusar de una niña de cinco años y que llegó a figurar en la lista de Íñigo Errejón de cara al congreso de Vistalegre II celebrado en 2017.

Grave es que Podemos le baile el agua a la satrapía de Irán, a la dictadura del infame Nicolás Maduro o a los proetarras de Bildu. Sin embargo, en la política española no pueden tener sitio condenados por pertenencia a banda armada ni pederastas. Nuestra sociedad no debe permitirse representantes de este fuste. Delincuentes que sólo aportan perfidia al respetable ejercicio de la representación pública. Algo que, por otra parte, denota la inexistente catadura jovenlandesal de los comunistas bolivarianos. Podemos es un partido que vive y se alimenta de la destrucción. De ahí que recurran a quienes la practican. Los españoles deben tomar nota y darles la espalda en las próximas elecciones.
 
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