El Gobierno jovenlandés ha aprobado, en sesión plenaria del Parlamento, la declaración de las doce millas (22 kilómetros) de aguas territoriales y las 200 (370 kilómetros) de Zona Económica Exclusiva a lo largo de la costa del Sáhara Occidental para reclamar su soberanía sobre ellas.
Con ello, aspiran a solicitar una ampliación hasta las 350 millas (648 kilómetros) que le permitirían reclamar los «tesoros» escondidos en el monte submarino Tropic, situado a mil metros de profundidad a unos 499 kilómetros al sudoeste de la isla de El Hierro.
Allí, lo que hay es, principalmente, telurio. La importancia de este elemento, el número 52 de la tabla periódica, radica en su uso especial en el sector de la industria electrónica, ya que se trata de un componente con grandes capacidades de conectividad y es imprescindible para la fabricación, por ejemplo, de paneles solares.
En Tropic se encuentra el mayor yacimiento del mundo de este mineral con, potencialmente, unas 2.670 toneladas -equivalente al 10% de toda la reserva mundial- y la Unión Europea lo ha considerado formalmente como una «materia prima estratégica».
No obstante, este monte submarino también alberga cobalto suficiente para construir más de 270 millones de coches eléctricos que es 54 veces la flota mundial actual de este tipo de vehículos.
Según el medio francés “latribune” jovenlandia tiene un acuerdo valorado en 400 millones de € con Francia que consta:
40 Sistemas de artillería CAESAR
4 baterías del sistema VL-MICA
Está previsto hacerlo oficial durante la visita de Macron a jovenlandia el próximo mes de febrero
jovenlandia va a aumentar su gasto en defensa de forma dramática durante el próximo ejercicio, tras acordarse, según diversos medios locales
, un incremento que ronda el 30% respecto al presupuesto del presente año. Nuestro vecino del sur, que tiene previsto aumentar el número de uniformados y que debe hacer frente a la factura de las numerosas compras realizadas en los últimos ejercicios, pasará de esta forma de gastar 35.155 millones de dírhams (3.288 millones de euros) en 2019 a destinar a sus Fuerzas Armadas 45.438 millones de dírhams (4.249 millones de euros) el próximo año, lo que supone aproximadamente el 4,5% de su Producto Interior Bruto, un gasto en defensa proporcionalmente mucho mayor que el español que no llega al 1 % de este indicador.
Hay que recordar que en los últimos meses, jovenlandia ha solicitado a los EE. UU., entre otros, 2.400 misiles contracarro TOW-2A, 6.000 bombas MK y kits de guiado JDAM, carros de combate M1A2 Abrams modernizados, camiones ligeros y cazabombarderos F-16 adicionales. Eso sin incluir las compras a otros países como Ucrania o China, ni tampoco la intención de hacerse con helicópteros de combate AH-64 Apache, aviones de reconocimiento o sistemas antiaéreos Patriot, todo como parte de un plan destinado a lograr la preeminencia regional frente a una Argelia que está inmersa en su propio proceso de desarrollo de una industria militar autóctona.
Además, este incremento radical del gasto tiene una segunda lectura frente a España, y es que jovenlandia, que hasta ahora debía optar por una estrategia asimétrica frente a España, cada vez más será capaz de contrapesar a nuestras Fuerzas Armadas de forma simétrica, pues las cifras de gasto son cada vez más parejas y el número y calidad de sus sistemas, también, en un momento en el que España tiene graves problemas para acometer el necesario proceso de modernización y sustitución de sistemas.
En cualquier caso, no todo el incremento presupuestario se destinará, como es lógico, a la compra de nuevo material, sino que buena parte del mismo será necesario para financiar el aumento en el número de uniformados. En este sentido, el gasto en personal se llevará la parte del león del presupuesto, pasando de 22.300 millones de dírhams (2.085 millones de euros) a 33.167 millones (3.101 millones de euros), cifra desproporcionada y que sirve para dar una imagen más exacta de la realidad jovenlandés, pese a los logros conseguidos en fechas recientes.
El gasto en mantenimiento y operación de los equipos en servicio pasará 6.051 millones dírhams (565 millones de euros) a 7.125 millones (666 millones de euros), mientras que la inversión en nuevos equipos pasará de 4.773 millones de dírhams (446 millones de euros) a 5.146 millones (481 millones de euros). El incremento en el presupuesto, visto de esta forma, es mucho menos preocupante de lo que dictan los titulares.
No obstante, la ley de presupuestos de 2020 también fija un compromiso de gasto de 110.000 millones de dírhams (10.285 millones de euros) a repartir en próximos ejercicios, de cara a la adquisición de 24 helicópteros Apache (se espera que sean entregados a partir de 2024), 12 helicópteros de transporte ligero, 24 helicópteros de transporte medio y el citado avión de reconocimiento electrónico, amén de los sistemas antiaéreos Patriot y obuses M109A6 Paladín, por lo que en este sentido, la intención de proseguir con el proceso de modernización parece firme. Del mismo modo, se pretende adquirir una nueva fragata, además de un sistema de vigilancia costera que le permita monitorizar el tráfico marítimo en sus aguas de responsabilidad.