Ahí va mi primer tema.
Sé que es un tema harto recurrente pero es imperativo recordarlo a menudo hasta que se nos grabe de una vez en la cabeza: JAMÁS PERDONÉIS UNA INFIDELIDAD.
Muchos de nosotros hemos perdonado alguna infidelidad por parte de nuestras parejas pensando cosas como "un error lo tiene cualquiera" o "si la perdono verá lo mucho que la quiero". ERROR, cuando tú perdonas una infidelidad no proyectas estas ideas, sino que eres una persona carente de valor y de autoestima.
Perdonar una infidelidad es justificar ese comportamiento, ya que ella reafirmará su creencia de que obró bien. Tarde o temprano volverá a seros infieles hasta que encuentre al candidato oportuno para daros la patada.
Actualmente tengo pareja y ya he aprendido la lección por si me vuelve a ocurrir, pero en el pasado perdoné a una novia con la que llevaba casi una década y solo sirvió para que finalmente terminara sustituyéndome.
Además, perdonar una infidelidad no es un acto que afecte únicamente al damnificado: contribuye a que cada vez se nos vea más a los hombres como a unos betas dispuestos a tragar con todo lo que se nos eche. Es hora de tomar el control de nuestras vidas y de ocupar el lugar que nos merecemos.
Saludos!
Sé que es un tema harto recurrente pero es imperativo recordarlo a menudo hasta que se nos grabe de una vez en la cabeza: JAMÁS PERDONÉIS UNA INFIDELIDAD.
Muchos de nosotros hemos perdonado alguna infidelidad por parte de nuestras parejas pensando cosas como "un error lo tiene cualquiera" o "si la perdono verá lo mucho que la quiero". ERROR, cuando tú perdonas una infidelidad no proyectas estas ideas, sino que eres una persona carente de valor y de autoestima.
Perdonar una infidelidad es justificar ese comportamiento, ya que ella reafirmará su creencia de que obró bien. Tarde o temprano volverá a seros infieles hasta que encuentre al candidato oportuno para daros la patada.
Actualmente tengo pareja y ya he aprendido la lección por si me vuelve a ocurrir, pero en el pasado perdoné a una novia con la que llevaba casi una década y solo sirvió para que finalmente terminara sustituyéndome.
Además, perdonar una infidelidad no es un acto que afecte únicamente al damnificado: contribuye a que cada vez se nos vea más a los hombres como a unos betas dispuestos a tragar con todo lo que se nos eche. Es hora de tomar el control de nuestras vidas y de ocupar el lugar que nos merecemos.
Saludos!