Un síntoma más de la grave enfermedad que sufre Cataluña. Una suerte de esquizofrenia colectiva aderezada con manía persecutoria y victimismo galopante.
Una región perdida para la,causa del simple sentido común.
Nuevo montaje victimista indepe. A la hora de inventar agravios son unos cracks. Ahora resulta que la culpa de los atentados es también del Estado, cuando los Mossos y la alcaldía de Barcelona pasaron de los avisos que recibieron.
50 desquiciados, seguro que procedentes de los desaparecidos CDR, que faltaban a clase para destrozar el mobiliario público y quemarlo todo. Carne de cañón al servicio de puajdemente y la Borrás, a la que hasta ERC quiere borrar.
El independentismo catalán se ha convertido en una enfermedad degenerativa. La piscina de la Rahola. Esa es la imagen.
Mas que españa asesina deberían gritar estado asesino porque desde luego desde eta al 11 m pasando por las ramblas todo todito todo lleva la firma del cni.