¿Maltrato y torturas?
La defensa de los exconsellers denuncia que les trasladaron a prisión esposados y sin cinturón de seguridad
04/11/2017
Esposados con las manos en la espalda y sin cinturón de seguridad. Así fueron trasladados a la guandoca los consellers cesados el pasado jueves por la noche, según ha denunciado este sábado el abogado de Puigdemont y los exconsellers del PDeCAT, Jaume Alonso Cuevillas.
El letrado ha descrito como "una humillación innecesaria" el trato recibido por los miembros del Govern cesados en el plazo entre las 17h., cuando la jueza Carmen Lamela ordenó su prisión incondicional, y las 22h. del jueves, cuando finalmente llegaron a sus respectivas cárceles –Estremera para Oriol Junqueras, Raül Romeva, Carles Mundó, Josep Rull, Jordi Turull y Joaquim Forn; y Alcalá Meco para Dolors Bassa y Meritxell Borràs.
"Estoy en shock. En 33 años de profesión nunca me había encontrado con esto", ha asegurado Cuevillas. En concreto, según ha explicado el letrado,
los exconsellers fueron esposados por la espalda, algo que "sólo se hace con presos peligrosos", ha dicho Cuevillas. Una vez en el furgón policial, el letrado ha indicado que los agentes no pusieron el cinturón de seguridad a los exmiembros del Govern.
Cuevillas ha lamentado además que los furgones "
recorrieron toda la provincia de Madrid a gran velocidad" con los exconsellers esposados por la espalda y sin cinturón, y que tardaron horas hasta llegar a centros penitenciarios situados a 70 y 40 km de la capital. Asimismo, ha asegurado que
una vez en la guandoca, los funcionarios obligaron a dos exconsellers a desnudarse "como si fuesen traficantes".
Impresionante.