La cepa de Manaus es más transmisible, más virulenta, afecta más a gente joven, es capaz de evadir anticuerpos y por tanto de causar reinfecciones. Está llevando a Brasil al caos hospitalario.
La única esperanza parece estar en que las infecciones pasadas y las banderillas sí permiten crear una barrera inmunitaria por las Tcells que, aunque no evitaría las reinfecciones, sí ayudaría a pasar la enfermedad de forma no grave. Para esto último sería fundamental contar con un registro en Brasil de reinfectados y posterior evolución de la enfermedad. Pero me da que tratándose del país que es, no contaremos con ese valioso análisis estadístico para salir al 100% de las dudas.
En conclusión, hay que acelerar a toda leche la vacunación de la población incluyendo la más joven si queremos de verdad que en España podamos contar con un Verano tranquilo y vislumbremos el final de la esa época en el 2020 de la que yo le hablo a lo largo de 2021.