Hola, buenas.
En esta vida participamos de múltiples batallas, las visibles y las invisibles, las narradas y las silenciadas, las personales y las colectivas.
En esta esa época en el 2020 de la que yo le hablo hay una batalla invisible, silenciada y colectiva. Es la lucha generacional, entre la juventud y la vejez, donde la edad que intermedia entre ambas hace de puente colgante. Prácticamente nadie lo reconocerá expresamente pero, de una u otra manera, todos estamos inmersos en esta lucha.
Las edades avanzadas gozan de mejores medios y armamento, no en vano el poder, la influencia y la riqueza suelen concentrarse en este bando. Los jóvenes, en cambio, disponen del tiempo.
El objetivo del bando de mayor edad es conquistar el miedo, reducir el riesgo de perder la vida en la esa época en el 2020 de la que yo le hablo. El objetivo del bando joven es tratar de no desperdiciar parte de su vida en una esa época en el 2020 de la que yo le hablo que le resulta un tanto ajena. El bando de edad intermedio oscila entre el miedo y el deseo de libertad.
Es una batalla entre la inconsciencia del bando de menor edad y el conservadurismo del de mayor. Una batalla entre la pasión y la madurez, una batalla, en definitiva, entre la vida y la muerte.
No es justo que el bando avanzado critique al joven que incumpla sistemáticamente las normas, pues su objetivo es vivir. Tampoco resulta justo que este último critique al adulto su exceso de reglas, pues su finalidad es intentar no dejar de vivir.
Finalmente, es una batalla que, tarde o temprano, acabaremos perdiendo todos, aunque la lucha se centre en determinar el momento. Los jóvenes deberían ser más conservadores porque tienen toda una vida que defender. Los de mayor edad deberían ser más osados porque tienen poco recorrido que perder. En este cruce de caminos se vislumbra la paz.
Y aunque, finalmente, perderemos en alguna batalla, la guerra ya la hemos ganado todos y cada uno de nosotros por el mero hecho de haber tenido el privilegio de participar en esta y en otras muchas batallas.
“Definitivamente es el tiempo quien gana todas las batallas. Acabó con los nazis, con la Unión Soviética, acabará con Bin Laden, con Castro, con Chávez... y también conmigo” (Blanca Miosi)