Si el bichito no te mata, te reprograma. Sigues viviendo con un nuevo sistema operativo funcionando,como una nueva versión de ti mismo, quizás mejorada.
Si el bichito no mata el sistema, lo reprograma, con un nuevo mecanismo de valor que lo haga más eficiente.
Antes se hacía a con sangre y fuego, hoy no compensa, no sale a cuenta y debe realizar de manera camuflada, que mantenga las estructuras del sistema con tiempo suficiente para su adaptación y evolución “biológica”.
el corazón seguirá bombeando pero siempre bajo las ordenes del cerebro que todo lo dirige, si es necesario se trasplantará la “bomba” si se ve que no está por la labor (quizás este ya pasando), igual con un chute mas de anfetaminas la gripamos de una vez, engañémosla pues, infectémosla pues. El experimento no da mas de si, es más algunos dicen que pone ya en riesgo al paciente, volvamos a regar el cuerpo con dinero eficiente y duro que nos quite los michelines y nos baje el colesterol que tenemos por la nubes.
Hagamos entender al personal que es necesario, imprescindible, saludable. Se queja, si, está muy dopado, drojado. Terapia de choque pues. La salud, siempre la salud, ¿no dicen que está antes que el dinero? ¿o después? Se debate mucho estos términos.
Salud o dinero, salud o dinero, nos preguntan desde arriba…….salud gritará el pueblo…..es igual yo también soy la salud. (y el dinero).