El problema no es solo el económico, sino requisitos como que debe estar en inglés o español y reflejar el DNI (en muchos sitios no saben ni qué es eso o no lo usan de la misma forma), y la incertidumbre de no tener la garantía de que el resultado llegue a tiempo antes del viaje. Y además no existe la posibilidad de hacer el test en España y hacer cuarentena mientras tanto, como en otros países. En teoría con no tenerlo (o tenerlo solo en determinado formato) ya incumples la normativa y te pueden multar con miles de euro
Por otra parte, desde el punto de vista meramente sanitario no es la forma más efectiva de hacerlo. Todo el mundo exprimirá al máximo el plazo de 72 horas para hacer el test (para aumentar las probabilidades de que el resultado llegue a tiempo), pero esto disminuye el valor del test, sobre todo teniendo en cuenta el tiempo de incubación, la relativamente baja sensibilidad, y las posibilidades de contagiarte durante el viaje. En Alemania por ejemplo, primero son 5 días de cuarentena obligatoria, y solo a partir de entonces es posible abandonar la cuarentena con una PCR negativa hecha (en Alemania) después de esos 5 días. Y esto se hace así entre otras cosas para tener en cuenta el tiempo de incubación y los contagios durante el viaje.
A eso además le añales la arbitrariedad de pedirlo solo si llegas por avión o barco, pero no por carretera. Y también que es cuestionable exigirlo para gente que viene de países europeos con una incidencia mucho más baja que la española (pero no a quien viene de una región española con mayor incidencia...).
En resumen, que una medida en principio útil se aplica de nuevo tardísimo (porque cuando de verdad esto era útil es cuando en España la incidencia era baja en comparación con la de los países de los que venía la gente, como el caso de viajes desde latinoamerica en verano), y de forma chapucera y poco meditada. Pero eso sí, se hace como siempre de la forma que más toque los bemoles a la gente, en este caso los españoles que quieran ver a su familia en navidad.