Bueno, pues con el final del curso escolar y la llegada del verano me gustaría hacer un pequeño pacoanálisis de como han ido las cosas. Aprovecho para hacer diferentes consideraciones personales con un poquito más de perspectiva, aprovechando este interludio de cierta calma que espero que dure.
* Colegios:
Durante todo el curso escolar me he comido dos confinamientos, uno por hija. El goteo de clases confinadas ha sido constante, el record creo que fue de ocho o nueve a la vez, la mayoría de ellas de la ESO y Bachillerato.
Dicho lo cual debo reconocer que casi lo único que ha hecho bien el gobierno catalán ha sido el protocolo escolar. !500 alumnos, un año de esa época en el 2020 de la que yo le hablo y no ha habido transmisión comunitaria en las aulas. Hasta donde yo sé todos los casos han sido contagios producidos fuera del colegio. En ese sentido el colegio ha servido más como detector de casos que como propagador de los mismos.
Los protocolos aplicados han sido: reducción de clases, ventilación de las aulas, grupos burbuja, mascarilla hasta para hacer gimnasia y realización de test muy rápida y eficaz, en la misma escuela, con confinamientos preventivos algo exagerados pero desde luego eficaces.
Ha habido mucha alarma y mucha preocupación por el papel de los colegios y los niños en la propagación de la esa época en el 2020 de la que yo le hablo. En el caso particular de Cataluña y en el más concreto de las escuelas que conozco en ningún caso ha sido la escuela un vector de transmisión, posiblemente, como decía antes, por lo bien que han funcionado en este caso los protocolos y medidas adoptados en este ámbito.
* Pacunación:
Todos los viejunos que conozco se han pacunado, pero conforme vamos bajando edad voy encontrando más personas que han decidido no hacerlo. Algunos amigos y amigas de mi entorno prefieren esperar a otoño o a futuras banderillas, algún otro ha decidido no vacunarse en ningún caso. Así a ojo diría que un 70% de mi entorno (cuarentones) se ha medicado, un 20 se va a esperar y un 10 no lo hará en ningún caso. Debo presumir de que afortunadamente existe respeto absoluto por la decisión de cada uno y, al menos entre la gente más cercana, no he encontrado a nadie que haga especial proselitismo en un sentido o en otro.
A mi personalmente me costó mucho decidirme. Como he venido diciendo me parece que para mayores de 60 la vacunación es la opción más sensata por mucho, que en el caso de niños y adolescentes la vacunación es un crimen, pero que en la franja 30-50 tengo más dudas que certezas.
Finalmente me decidí ha hacerlo pero solo en el caso de que me tocase una banderilla arm. Vacunar con Jansen me parece una tomadura de pelo (además se habla mucho de lo "dura" que es la astramoñeca pero todos los que conozco con Jansen se están llevando unas ostras que paqué) existiendo banderillas mejores disponibles.
Mis viejos y mis suegros van doble pfiferizados hace tiempo, mi contraria lleva doble astramoñeca y a mi me grafenan el lunes con la segunda Michelle también.
El otro día unos amigos pacunados me preguntaron sobre que hacer con los niños. Aquí si que traté de convencerlos de la no vacunación, puesto que resulta evidente que es más peligroso hacerlo que el propio bichito en esas franjas de edad.
* Mi tesis sobre el viruh
Llevo por aquí desde el post uno de Ultrapaco, incluso me creé este multi ad hoc para participar exclusivamente en el tema de la esa época en el 2020 de la que yo le hablo desde un punto de vista muy personal. Me tiene desconcertado y fascinado a la vez la capacidad de este evento para provocar dilemas extremos: desde que el bichito no existe a que el bichito es el más peligroso del mundo, desde que es una gripe floja a que es el neumosidravoladorstealth, desde que las pacunas son la gran revolución medica mundial a que son chips de grafeno antenoso cincogeistico billgatianos, etc...
Más allá de la mucha y buena información encontrada en este foro, del mucho ruido que acaba confundiendo también, de lo consultado con los profesionales médicos que uno conoce y de la propia imaginación puesta en el asunto, tras más de un año de esa época en el 2020 de la que yo le hablo para tratar de encontrar un punto de referencia entre tanto follón prefiero centrarme en el impacto directo que conozco de primera mano en mi entorno.
En la franja 60-85 la cantidad de gente hospitalizada, entubada, muerta es altísima en relación a cualquier año que recuerde. En un invierno han caído tres vecinos de mis padres, dos míos, el hermano y los dos cuñados de una de las mejores amigas de mi progenitora, el marido de la amiga de la infancia de mi progenitora (un tio de 70 años ultrasano aparentemente), el 50% de los residentes de una de las residencias de mi ciudad, etc...
En la franja 50-60 solo conozco un muerto directo, pero tampoco ningún año había conocido tanta gente de esta edad hospitalizada por gripe ni por neumonía, y mucho menos tanta gente que haya pasado por la UCi.
En la franja 30-50 conozco mucha gente que lo ha pasado como una gripe fuerte de narices, de estar puteados y de baja casi un mes, pero conozco más de los que me gustaría que además de eso se han quedado "tocados" en alguna medida. El tan cuestionado el bichito permanente o lo que shishi sea existe. Yo no había visto hasta ahora gente que lleve 7 meses seguidos con fiebre, gente que dice que ha perdido la capacidad de concentración, una compañera de trabajo que lleva 4 meses de baja por problemas digestivos graves + problemas de vista, otro que apenas puede caminar si ahogarse y que también está de baja, una compañera que como siga así tendrá que irse a Turquía a ponerse pelo y que además dice que se ha quedado algo "lenta", etc...
Y siguiendo con esta franja el caso que más me ha tocado ha sido el del padre de una compañera de mi hija mayor, 46 años, no rellenito, una semana boca abajo en Uci, su señora de baja un mes con mareos y sigue sin poder trabajar, sus hijas afortunadamente 100% asíntomáticas.
Y sirva toda esta casuística para sostener mi intuición: esta cosa no me parece natural. Y fijaos que digo intuición, o sea que la fuente efectivamente son mis narices morenos. Me huele a arma de guerra, lo que yo veo es que es una cosa supertransmisible que sin medidas te colapsa el sistema en cerocoma, teniendo efectos significativos sobre la población en edad productiva. Desde ese punto de vista, las muertes de los más mayores serían un mero efecto secundario. El patógeno, que diría el chino comunista, parece diseñado para "herir" a una determinada franja de la población.
Si el bicho se ha escapado por un error o ha sido soltado como etapa de una guerra hibrida para mi incomprensible ni lo se ni me importa mucho. Si que me da la impresión de que las autoridades saben desde el principio que la cosa es gordísimam y si que me da la impresión de que muchas de las contradicciones y insensateces que han hecho tienen que ver con estrategias de control de daños.
En ese sentido, la pacuna con sus prisas y sus peligros, se habría puesto en marcha ante el acojone que provoca lo que temen que pueda llegar ha hacer el bicho.
En este momento yo veo la conspiración por ahí. Y por eso, con muchas dudas, decidí vacunarme.
En todo caso, lo que si que creo fervientemente es que nuestro enemigo en ningún caso es el vecino.
Cuidado pues ahí afuera.
Saludos