Pregunta el fiscal: ¿es cierto que usted el día de los hechos se cagó en los muertos del denunciante, en toda su p*ta familia, en la perra de su madre y en el hijo de p*ta de su padre, al igual que en toda la corte celestial?
Respuesta del acusado: no, es falso... Yo estaba tranquilamente trabajando en la fundición y entonces le dije: "Antonio, por Dios, ¿no te das cuenta de que me has echado todo el acero fundido por la espalda y qué es una sensación muy desagradable?