El Vought ASM-135 ASAT fué el primer misil antisatélite puesto a prueba con éxito.
The ASM-135A anti-satellite missile (ASAT) was the only U.S. air-launched missile ever to destroy a satellite. In the late 1970s, the U.S. anticipated Soviet development of “killer satellites” that
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Se lanzaba desde un F-15, pesaba 1200kg y localizaba al objetivo con infrarrojos, corrigiendo su trayectoria con la ayuda de 63 pequeños motores de maniobra.
Ver archivo adjunto 1785933
China, India y Rusia han probado también misiles antisatélite con éxito, básicamente misiles balísticos disparados contra satélites.
Parece fácil, los satélites se mueven con trayectorias predecibles y no se pueden esconder ahí arriba. Pero hay que poner en órbita muchos kilos y acertar a un blanco cuya velocidad relativa puede acabar midiéndose en kilómetros por segundo.
Satélites atacando a otros satélites no se ha probado todavía, que se sepa.
Es más problemático porque subir kilos a la órbita es caro, y los satélites tienen márgenes de maniobra en sus órbitas escaso y a costa de consumir un combustible muy preciado (más kilos que no puedes usar sin cabeza)
El uso de láseres queda muy bonito, pero la energía necesaria para hacer daño a una distancia elevada y con un tiempo limitado de "iluminación" está fuera del alcance de los paneles solares que montan los satélites, incluso de los RTGs.
Los pulsos electromagnéticos, que implican explotar una nuclear allá arriba (en las películas hasta se pueden montar pulsos electromagnéticos en una furgoneta sin explosión nuclear, como en Ocean's Eleven, pero en la vida real eso no existe) tienen el inconveniente de freír no sólo los satélites enemigos, sino los propios. Es una opción propia del Armagedón final, pero si has desatado el Armagedón en la Tierra, ¿qué más te da los satélites?
La "Guerra de las Galaxias" de Reagan puso histéricos a todos, pero demostró que de los bonitos dibujitos (hoy serían power points) a la realidad había un trecho inalcanzable en presupuesto y realidades físicas.
El ASM-135 formaba parte de esa "Guerra de las Galaxias" y se canceló por sobrecostes y porque no se le veía efectividad real. Una consecuencia de su presencia fué el desarrollo de cabezas nucleares maniobrables para evitar ser "cazadas" en la reentrada, igual que el MiG-25 nació de la presencia no materializada del B-70 Walkyrie
