Hay algo que no es del todo cierto en la noticia y es que en la mayoría de los centros públicos, el menú diario cuesta alrededor de 4€, no los 7 que se dicen.
Pero lo que es completamente cierto es el tipo de comida que dan y la cantidad. Tal cual aparece en las fotos.
También hay que decir que cuando en los comedores escolares ponen pescado, puré de verduras, legumbres, sopas, carne guisada, etc. es decir, comida normal y corriente, no la come ni dios. Y es comida rica. Pero la mayoría de los alumnos no ha aprendido a comer esas cosas en su casa y cuando ven un puré verde en su plato, por poner un ejemplo, piensan que es comida para extraterrestres. Y lo dejan todo en la bandeja. Se hinchan a pan y a yogures de postre y luego van a casa diciendo que la comida del cole es una porquería y que han tenido que comer solo pan. Dicho por profesoras madres que comen en los comedores escolares junto a sus hijos. Es imposible que la comida del comedor sea como la de casa, pero en muchos casos, hasta será mejor. Simplemente porque las personas que la elaboran son cocineros profesionales y en las casas cada vez se pasa menos tiempo delante de las cazuelas: cada vez más echamos mano de la comida congelada o semipreparada o preparada por completo.
Así que con estas prerrogativas, en los comedores escolares comen bien solo los pequeñines porque se sientan a comer con hambre y todavía no han desarrollado el mal gusto por la comida prefabricada. Pero en cuanto crecen y su paladar solo se ha hecho a hamburguesas y pizzas y comida mierdosa, dejan todo en los platos y en las bandejas. Y esto lo cuentan absolutamente todos los profesores que comen en los comedores escolares.
La cantidad de comida que se tira al día en todos los comedores escolares serviría para alimentar a las familias de todas las personas en paro de este país.
Sobre la concesión a las empresas de catering, seguramente que sí será para amigos de los politicastrones, eso seguro. Pero eso no implica que las personas que trabajan en la cocina de esos caterings sean unos desalmados que maten de hambre a los alumnos.
