LIRDISM
Madmaxista
España después del varapalo del 82 siempre ha presentado grandes selecciones, incluso cuando se han marchado rápido como en el 98. Pasa que un mundial es un torneo raro, donde se te tienen que alinear todos los planetas durante un mes para ganarlo, cualquier error o situación anómala te manda a la calle. Por eso muchas veces no lo gana el que juega más bonito o el que lo merece, sino el que menos contratiempos tiene.
La del 98 era una selección esperanzadora porque pasó la fase de clasificación a goleadas y arrasando y venía de más de 20 partidos ganando, era una máquina de equipo para enfrentarse a dos de las selecciones más potentes jamás vistas que hoy arrasaría a cualquiera como fue la Francia de Zidane y el Brasil de Ronaldo y España era capaz de estar a su altura pero llegó el mundial y jugaron encogidos y sin confianza. Todo empezó a salir mal y con selecciones que hace unos meses ganáriamos sin despeinarnos y ahora nos atascábamos.