Yo no soy antropólogo, pero creo que, ante la duda, hay que retrotraerse a como hemos sido durante el mayor periodo de nuestra historia evolutiva. Y por lo poco que sé, nuestra vida, como cazadores recolectores, se enmarcaba en la familia nuclear (pongamos entre 10 y 20 personas) y la banda (entre 25 y 150). Podían protegerte, enseñarte, y realizabas actividades comunes.
Aún cuando eres niño, en las sociedades contemporáneas y hasta en las urbanas, se reproducía, con imperfecciones, este esquema. Tenías tu familia y el colegio-la calle. Todo lo que salga de este esquema, creo que tiene o puede tener repercusiones psicológicas graves. Es decir, puedes no tener un padre, porque haya fallecido o tu madre se haya inseminado, pero al menos tienes que tener alguna figura paternal positiva, como un tío, un profesor-tutor durante muchos años. Algo. Si no, estás perdido.